El escáner para detectar drogas en el megapuerto de Moín, en Limón, estuvo dañado entre mayo y octubre pasado, tras recibir un fuerte golpe. Pasados seis meses, en noviembre, la avería fue reparada y el equipo podía entrar en funcionamiento de inmediato, según lo constató la propia Fiscalía en una inspección ocular realizada la semana anterior. Sin embargo, actualmente, sigue desconectado, dejando así al país desarmado frente al incesante trasiego de estupefacientes.
¿La razón? La transnacional APM Terminals, que opera el escáner como servicio complementario al contrato, impuso dos condiciones al Gobierno para reactivarlo, las cuales, según las propias instituciones estatales, son factibles de cumplir y, por ende, el aparato volvería a trabajar en los “próximos días”.
En primera instancia, la concesionaria pidió que hubiese, al menos, un policía en el Cuarto de Operaciones del escáner para que supervise la labor que allí hacen los empleados contratados por la compañía y así asegurarse de que el narco no se infiltre, según dijo a La Nación José Manuel Sáenz, secretario técnico del Consejo Nacional de Concesiones (CNC).
“APM lo que pide, para evitar que salga gente contaminada (que colabora con organizaciones criminales para trasegar droga), es que al menos haya presencia 24/7 de un supervisor del Ministerio de Seguridad Pública o de alguna autoridad para ejercer vigilancia en el cuarto”, detalló Sáenz.
Lo segundo que solicitó la firma holandesa es que el Centro de Inspección Remota opere las 24 horas del día, los siete días de la semana y no solamente 18 horas diarias como ocurre en la actualidad, confirmó Sáenz. En este lugar (operado por las carteras de Hacienda, de Seguridad Pública y de Agricultura y Ganadería) es donde determinan si el contenedor está limpio o contaminado con base en las imágenes que les llegan del escáner.
Por lo anterior, es vital para la transnacional tenerlo activo siempre. “Como opera solo 18 horas al día, se tenían problemas de atrasos (...). Lo que pide es que funcione 24/7, como funciona el propio puerto”, señaló el secretario del CNC.
La vocería de APM Terminals insistió en que hasta el momento, ellos han cumplido con todas las obligaciones contractuales, ya que el escáner es un servicio complementario que se brinda “para contenedores de exportación a su ingreso a la terminal”.
Agregó que, por el momento, no se contempla hacer esta inspección no intrusiva a los contenedores de importación, ya que hay congestionamiento en el patio del muelle y “debido a que la capacidad actual y el diseño actual del escáner no lo permite”.
Dicho eso, enfatizó en que estas inspecciones son “una obligación de las autoridades estatales y no del concesionario”. Se le consultó por una posible fecha de reconexión del equipo y un criterio sobre los motivos por los cuales sigue sin operar; sin embargo, no se recibió respuesta al cierre de este artículo.
Este equipo, que tuvo un costo de $2,6 millones, empezó a funcionar en diciembre del 2019, pero en mayo del 2021 un vehículo pesado lo impactó y lo dejó fuera de operación, dejando al descubierto el país ante el insistente trasiego de drogas. Desde esa fecha, la necesidad de ponerlo a operar es notoria, máxime que tan solo el año pasado esta herramienta permitió detener el tráfico de al menos 11 toneladas de cocaína camufladas en contenedores que iban hacia puertos de Europa.
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¿Qué tan factibles son las peticiones?
Sobre la supervisión policial en el Cuarto de Operaciones, Sáenz indicó que Michael Soto, ministro de Seguridad Pública, no tuvo objeción; más bien, coincidió en tener esta vigilancia para evitar corrupción.
Soto, en entrevista con La Nación, dijo que no podía referirse al asunto, pero sí recalcó la importancia de que las entidades trabajen en conjunto para poner a funcionar cuanto antes el escáner, ya que “es una herramienta muy útil y de trascendencia para obtener más éxitos (decomisos de drogas)”.
En cuanto al funcionamiento ininterrumpido del Centro de Inspección Remota, la Dirección General de Aduanas mencionó que todas las instituciones públicas involucradas han tomado previsiones para ponerlo a funcionar las 24 horas del día “a partir de los próximos días”. Pese a que eso significa que la jornada se debe extender y se debe contar con más personal allí, la entidad aseguró que no se incurrirá en ningún gasto adicional.
“Se ha identificado la cantidad de plazas adicionales necesarias y se ha determinado que se pueden necesitar plazas profesionales que cuentan con contenido presupuestario en este periodo y que producto de renuncias o jubilaciones han quedado disponibles y se les puede reubicar en esta actividad”, apuntó por medio de la oficina de prensa. Para el 2022, agregó Aduanas, se pretende reforzar ese equipo profesional para hacer más eficiente los análisis de las imágenes.
Tampoco significa un problema conseguir personal con el perfil que se requiere para estos puestos: profesionales en materia aduanera, fitosanitaria o investigaciones policiales y con conocimientos para interpretar imágenes realizadas por escaneo. Lo anterior porque “cualquier persona nueva, recibe dicha capacitación”, señaló la institución.
Así las cosas, tras el reacomodo que esto significa, el escáner entraría a funcionar en los próximos días poniendo un freno al constante trasiego de drogas que se da en este muelle.
El daño
El 3 de junio pasado, el Ministerio de Seguridad Pública recibió la alerta del Consejo Nacional de Concesiones (CNC) de que el aparato quedó fuera de servicio. Desde entonces, la Policía de Control de Drogas (PCD) trabaja únicamente con labores de análisis, perfilamiento de contenedores, trabajos de inteligencia y evaluación de información para dar con posibles cargamentos de cocaína en los contenedores.
APM Terminals confirmó, en forma escueta en octubre, que el escáner estaba fuera de servicio y alegó que se debía a labores de mantenimiento. “La operación del escáner no fue detenida voluntariamente. En este momento se encuentra bajo mantenimiento para cumplir con las necesidades y actualizaciones técnicas requeridas, retomaremos su uso en cuanto vuelva a estar disponible”.
Aunque La Nación quiso conocer con detalle por qué fue necesario el mantenimiento, tomando en cuenta que comenzó a operar apenas en diciembre del 2019, la concesionaria indicó que no darían más detalles al respecto.
A raíz de eso, el 23 de noviembre, la Fiscalía Adjunta de Limón realizó una inspección ocular para verificar el funcionamiento del aparato luego de que el 2 de noviembre pasado, se abriera una investigación penal de oficio por el delito de desobediencia en contra del gerente de APM, de apellido Goeritz.
Según indicó el Ministerio Público, en una fecha no especificada, el Consejo Nacional de Concesiones (CNC) notificó a Goeritz para que en el plazo de tres días se pusiera en funcionamiento dicho escáner. “Sin embargo, en apariencia, esta acción habría sido omitida por parte del funcionario, por lo que la Fiscalía le abrió un expediente”, señaló la entidad. Días después de esa diligencia, el ente fiscal informó de que el equipo funciona correctamente.