Un lío originado días atrás por el no pago de un premio por ¢25.000 de una rifa, hizo que un guarda nocturno azotara antenoche con un cable eléctrico a una mujer que le reclamó.
Un lío originado días atrás por el no pago de un premio por ¢25.000 de una rifa, hizo que un guarda nocturno azotara antenoche con un cable eléctrico a una mujer que le reclamó.