Los magistrados de la Sala IV ordenaron al Hospital México coordinar las acciones necesarias para operar, en un plazo máximo de ocho días, a una mujer con cáncer gástrico.
Este fallo constitucional es producto del primer recurso de amparo hecho público, que pone un paciente afectado por la paralización de los quirófanos del México.
El funcionamiento de las 17 salas de ese hospital, que es responsable de atender al 54% de la población nacional, se detuvo debido a fallos en el voltaje, detectados hace cinco semanas.
Según la sentencia 2014-14245, del 27 de agosto, la Dirección Médica de ese centro de salud debe coordinar con la Gerencia Médica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para que la cirugía se pueda realizar en cualquier otro hospital, en aras de salvaguardar la vida de la amparada.
La paciente es una mujer, a quien se le debe extraer el estómago, informó la oficina de prensa de la Sala Constitucional.
Esta asegurada tiene sus ganglios inflamados y, esto, según la Sala IV, compromete su vida.
“Este Tribunal reitera que los pacientes no deben soportar la falta de organización y administración adecuada de los recursos materiales y humanos con los que cuenta la CCSS, los cuales se nutren de las aportaciones sociales que hace cada uno de los asegurados, por lo que resulta injustificable la prestación tardía del servicio de salud requerido”, manifestaron los magistrados. La sentencia se votó de forma unánime.
Crisis. El subdirector del México, Juan Ugalde, dijo ayer que no han sido notificados aún por la Sala IV. Sin embargo, obedecerán la orden como corresponde.
A la paciente, agregó, se le operará ya sea en el propio hospital o en uno de los quirófanos cedidos por el Instituto Nacional de Seguros (INS) para atender pacientes oncológicos, en el Hospital del Trauma.
Ugalde confirmó que este es el primer recurso de amparo que reciben por esta crisis.
Las jefaturas del Hospital México solicitaron, esta semana, declarar emergencia nacional la crisis de quirófanos y pidieron al presidente Luis Guillermo Solís visitar el centro médico.
En principio, el arreglo de las salas se prolongará cuatro meses, aunque la Contraloría General de la República aprobó una contratación directa por ¢100 millones para mejorar nueve quirófanos y tenerlos funcionando en ocho semanas.
El director del hospital, Douglas Montero Chacón, ha sostenido que las fallas de voltaje aparecieron de sorpresa, y asegura que se está haciendo lo posible para atender los casos urgentes.
Entre los hospitales que apoyan está el de Heredia, la Clínica Oftalmológica, el Calderón Guardia y el Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare).