Agentes federales allanaron la mansión de Clarence Gary Austin, exesposo de la modelo Lynda Díaz, en Florida, Estados Unidos, como parte de una investigación por apuestas deportivas ilegales que, presuntamente, se dieron desde Costa Rica.
La acción policial se realizó en abril pasado, pero fue dada a conocer el pasado miércoles por el diario digital Sun Sentinel de Florida, cuya noticia fue replicada al día siguiente por otros medios como VegasSlotsOnline y Casino.org.
Las publicaciones revelan que, según documentos de la Corte Federal, durante el allanamiento fueron confiscados casi $4,3 millones en efectivo, 61 lingotes de oro, cinco autos de lujo y un anillo de campeonato del Miami Heat.
Por el momento, no se han presentado cargos penales en este caso, pero en los documentos presentados en un tribunal federal, se indica que se trata de una investigación sobre una “empresa ilegal de apuestas por Internet de Austin que ha producido más de $34 millones en ingresos ilegales durante su operación”.
La documentación señala que todo su dinero proviene de actividades ilegales: “Austin no tiene ingresos legítimos, excepto un cheque mensual del Seguro Social que recibe”.
El abogado de Austin, Howard Schumacher, dijo el miércoles que es “demasiado pronto para decir en este momento” si los cargos son inminentes y es prematuro comentar sobre el caso, el cual se está llevando a cabo en la Corte Federal de Texas.
Una portavoz de la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos no respondió a una llamada o correo electrónico para hacer comentarios. El fiscal federal del caso no respondió para hacer comentarios, dice la publicación del Sun Sentinel.
Los fiscales alegan que Gary Austin, de 80 años, es el propietario y operador de un sitio web de apuestas deportivas con sede en Costa Rica, que se llama Tradewinds, y señalan que este ha operado ilegalmente desde 1998.
“La investigación reveló que Austin ha establecido una intrincada organización nacional e internacional de lavado de dinero y métodos para realizar subrepticiamente transacciones monetarias con las casas de apuestas y los apostadores ubicados en los EE. UU. Para finalmente recibir y utilizar las ganancias ilícitas”, escribió uno de los investigadores.
Asimismo, los fiscales alegan que este hombre “estableció numerosas corporaciones nacionales y extranjeras, entidades comerciales y fideicomisos” para almacenar el dinero.
Durante el allanamiento de su mansión, ubicada en Sweet Bay Avenue, en el exclusivo barrio cerrado de Hawk’s Landing, en Plantation, los agentes decomisaron dos Mercedes, un Lamborghini, un Porsche Cayenne y un Land Rover Range Rover.
Los documentos no explican dónde obtuvo Austin un anillo de los Miami Heat ni a quién perteneció.
Pasado en Costa Rica
El paso de Clarence Gary Austin por nuestro país tomó relevancia cuando el 13 de julio del 2002 se casó con Lynda Díaz Suárez, que además de modelo era presentadora de televisión.
La boda, a la que asistieron medios de comunicación se realizó, en el Hotel Camino Real-Intercontinental en Escazú.
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Contó con la presencia de poco más de 300 invitados y en la ceremonia sonaron las notas del grupo Éditus y de 26 músicos de la Orquesta Sinfónica Nacional. Para la fiesta, la animación estuvo a cargo de los grupos Expresso y Requete.
Gary Austin había aparecido en una publicación de La Nación en mayo del 2001, cuando se hizo un investigación sobre la presencia en Costa Rica de exconvictos estadounidenses relacionados con estafas a casinos y apuestas ilegales.
En aquella ocasión, Austin minimizó la gravedad de los delitos atribuidos a sus compatriotas y más bien los comparó con lo que podría ser en Costa Rica cruzar un semáforo en la luz roja.
En ese momento habló como propietario de la empresa de apuestas Servicios Internacionales de Información Deportiva y dijo: “Los empresarios de apuestas que estamos aquí somos hombres de negocios independientes, sin conexión con el crimen organizado. Los ingresos del negocio no son suficientes para que se involucren este tipo de personas”.
La empresa Servicios Internacionales de Información Deportiva ya no aparece inscrita en Costa Rica.
Luego, en marzo del 2003, de nuevo el nombre de Gary Austin apareció en una noticia de La Nación cuando trascendió que la compañía Vinir Financial Services (VFS), constituida en las Islas Vírgenes Británicas pero radicada en Costa Rica, movilizó poco más de $120 millones para 12 compañías de juego, según constaba en estados de cuenta y copias de cheques y transferencias.
Eso sucedió pese a que la Procuraduría General de la República había dictaminado que era ilegal el ingreso al país de los fondos de apuestas.
Gary Austin, identificado como un operador de apuestas, explicó que la mayoría de las cuentas en Vinir estaban a nombre de empleados suyos que tenían su dinero personal ahí.
La firma Tradewinds tampoco aparece registrada en nuestro país.