Viajar a la isla colombiana en pleno 2018 es un maravilloso dejavú: el pequeño paraíso, destino turístico de moda en el país décadas atrás, parece estar detenido en el tiempo, anclado en el lema que les ofrece a turistas de todo el mundo “Aquí nadie corre”. Increíble que, apenas a 45 minutos, haya un microcosmos tan diferente al nuestro.