El memorando fue abundantemente censurado y no presenta ningún vínculo claro directo entre el gobierno saudí y los secuestradores aéreos.
La debacle en Afganistán confirmó lo que muchos sospecharon durante largo tiempo: gran parte de la política exterior de Occidente desde los atentados terroristas del 11 de Setiembre fue un fracaso
El actual mandatario ha atravesado momentos políticos difíciles desde que los talibanes tomaron el poder en Kabul el 15 de agosto y por la apresurada evacuación de más de 120.000 personas en una operación militar organizada por el ejército estadounidense.
Con actos en la Zona Cero, de Nueva York, y en Shanksville, Pensilvania, se honró a las víctimas que fallecieron en los ataques, perpetrados por 19 sujetos.
Hace 20 años una serie de atentados terroristas en Estados Unidos cambiaron el rumbo de muchos aspectos, en especial, en los aeropuertos.
Para el expresidente ‘muchas de nuestras políticas se han convertido en un desnudo llamado a la rabia, el miedo y el resentimiento’.
Shrivastava nació a las 10:05 a. m. de aquel martes hace 20 años. La Torre Sur había caído seis minutos antes y la Torre Norte colapsaría poco más de una hora después.
“¿Por qué nos odian tanto?”. Ese fue el clamor de miles de estadounidenses atónitos tras los atentados del 11 de setiembre del 2001, que dejaron casi 3.000 muertos y cambiaron el rumbo de la historia. Lo cierto es que la génesis del terrible episodio se remonta a los años 80, en un Afganistán ya en crisis.
Entre el pánico posterior a las explosiones, Pilar Madrigal pensó en sus padres, que ya habían pasado por el luto de perder a una hija y ahora vivían en zozobra la imágenes del atentado
Karen Baker era una experta en comunicación de crisis en el Pentágono el 11 de setiembre del 2001, pero nada podía prepararla para lo que pronto tendría que hacer: anunciar la muerte de sus amigos.