Gerente general del Banco Popular firmó despido sin goce de salario el pasado 3 de mayo. Foto con fines ilustrativos (Rafael Pacheco Granados)
“Cuando me puse la primera dosis de la vacuna de covid, él me dijo que me podía poner una vacuna, que era rico y que no dolía. Otro día cuando el señor... estaba comiendo y tenía un elote, empezó a decir: ‘así la tengo yo’ y un compañero le dijo: ¿Qué grande y gruesa? y él respondió: ‘no, llena de granos’. Otro día que estaba lavando los trastes llegó a mi lado y me dijo: ‘que rico quitarle el cubrebocas y darle un beso’.
“Estos son algunos de los comentarios de las situaciones que vivo todos los días con el señor... no me puedo descuidar porque me sale con algún comentario o me toca las nalgas o las piernas, yo no estoy tranquila con ese señor, cuando llega a la cocina, yo dejo lo que estoy haciendo y me voy porque no quiero estar sola con él”.
Estas son algunas de las declaraciones que dio una miscelánea, de apellido Corrales, al denunciar por hostigamiento sexual a quien se desempeñaba como gerente de la sucursal del Banco Popular en San Ramón, un hombre de apellido Fernández de 53 años. El testimonio es parte del expediente administrativo ODP-HS-DIRCH-1280-2021, que la entidad financiera abrió en agosto de 2021 contra el funcionario y que terminó en una resolución de despido sin responsabilidad patronal por la gravedad de los hechos.
La Nación contactó a Fernández para consultarle sobre este tema, pero dijo que no daría declaraciones.
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De acuerdo con el relato de la trabajadora, el gerente la molestaba con insinuaciones sexuales y acercamientos para rozar su cuerpo. Los hechos ocurrieron entre marzo y agosto de 2021.
“Yo tengo mensajes a mi WhatsApp personal donde el señor... me solicita que me presente en la oficina de él y que le llene de agua la botella, cuando estoy ahí, él toma la botella y la coloca en el escritorio y me dice que juguemos prendas y le da vuelta a la botella. En ese momento yo le indico que si le lleno la botella o me retiro a trabajar, entonces me la entrega para que la llene”, narró la víctima durante la investigación.
Como parte de la prueba presentada por la denunciante estuvo el testimonio de dos compañeros, quienes fueron informados sobre los comportamientos del gerente. También, mensajes de texto y grabaciones de llamadas al 9-1-1, pues en una oportunidad ella buscó ayuda en ese servicio de emergencias.
El órgano director a cargo de la investigación, integrado por Ligia Morales Vega, Bernardo Castro Chaves y Marisel Herrera Guillén, concluyó que “debe tenerse como cierto el Acoso u Hostigamiento Sexual atribuido al denunciado” y calificó el comportamiento del gerente de la sucursal bancaria como “acciones reiteradas, humillantes, ofensivas y evidentemente indeseables”.
Además, recomendó a la Gerencia General Corporativa el despido sin responsabilidad patronal. Esa medida fue ratificada por Marvin Rodríguez Calderón, gerente general corporativo, el pasado 3 de mayo. “Se instruye a la Dirección Capital Humano para que emita la respectiva carta de despido, el cual habrá de hacerse efectivo a partir del día 5 de mayo de 2022″, ordenó Rodríguez en el oficio GGC-500-2022, del cual La Nación tiene copia.
Óscar Vargas Quesada, abogado de la víctima, explicó que también mantienen una denuncia penal ante el Ministerio Público por el presunto delito de abuso sexual. El representante legal agregó que la mujer sufrió discriminación, ataques emocionales y, en la actualidad, enfrenta problemas para conseguir un nuevo trabajo.
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La gota que derramó el vaso
La trabajadora, quien solicitó mantener en reserva su identidad, relató a este diario que en una ocasión, Fernández vio una foto de sus hijas y realizó comentarios de tipo sexual sobre ellas, lo cual la molestó y la motivó a presentar la denuncia administrativa y penal.
Añadió que, meses después de haber presentado las denuncias, la empresa para la que trabajaba no logró renovar el contrato con el Banco Popular para la limpieza de instalaciones y eso provocó comentarios agresivos por parte de sus compañeras.
“Me decían que por haber denunciado el acoso sexual nos estábamos quedando sin trabajo”, comentó.