EscucharFranco Arturo Pacheco, candidato a primer vicepresidente de la Unidad Social Cristiana (PUSC), afirmó que la mayoría de los diputados de su partido votará afirmativamente los créditos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por $500 millones el lunes, en el plenario.
El compañero de fórmula de la candidata presidencial Lineth Saborío explicó a La Nación que, ante la lamentable situación de tener que recurrir a deuda para pagar el gasto corriente del Gobierno, consideran preferible hacerlo con el financiamiento del BID por sus condiciones más favorables.
“Ellos (los diputados del PUSC) han mostrado anuencia, apertura, desde un punto de vista de responsabilidad por el país. Tenemos reunión con ellos el lunes por la mañana”, agregó.
Pacheco explicó que, luego de las conversaciones entre el equipo de campaña de Saborío y la fracción legislativa, ha quedado claro que los diputados “sí estarían apoyando los créditos”.
“Por respeto a la fracción, pues las razones las dará don Pablo en el plenario, lo que hemos conversado es que dada la lamentable situación, es mejor asumir este financiamiento que obligar al Gobierno a emitir bonos de deuda interna. Lo que esperamos es que la mayoría de la fracción sí apoye los créditos”, enfatizó Franco Pacheco.
El viernes, el jefe legislativo del PUSC, Pablo Heriberto Abarca, respondió brevemente que realizará un razonamiento sobre su voto este lunes en el plenario del Congreso, en el momento en que se ponga a discusión de segundo debate el expediente 22.639, que contiene los dos contratos de crédito.
En el primer debate, ningún diputado del PUSC votó a favor de la iniciativa del financiamiento con mejores tasas de interés que las del mercado interno, mientras que cuatro votaron en contra: Abarca, José María Guevara, Aracelly Salas y María Inés Solís.
Ese día se ausentaron Pedro Muñoz, María Vita Monge, Óscar Cascante y Erwen Masís.
El jueves pasado, día en que estaba previsto el segundo debate, el financiamiento quedó en coma debido al alto número de ausencias en el plenario. Los créditos requieren de 38 votos para ser aprobados y ni siquiera alcanzaron los apoyos necesarios para ser colocados en el primer lugar de la agenda.
El problema es que el ofrecimiento del BID expira este lunes 20 de diciembre. Si no son aprobados ese día, se perderá el crédito con tasas blandas. El ministro de Hacienda, Elian Villegas, advirtió del riesgo de que el Banco Interamericano cierre la llave del financiamiento al país si los diputados entierran este financiamiento, como ocurrió con otro en el 2020.
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En diciembre del año pasado, los legisladores sepultaron otros dos empréstitos por montos similares, de $250 millones cada uno, sobre todo a instancias del Partido Liberación Nacional (PLN).
Este viernes, el diputado socialcristiano Pedro Muñoz alegó que nadie le había hablado con él sobre los créditos del BID y que no tiene ningún tipo de comunicación con la campaña de la candidata socialcristiana, Lineth Saborío. Esa versión fue confirmada por Franco Pacheco.
El jueves pasado, el gobierno de Carlos Alvarado limpió la agenda con la intención de darle prioridad al financiamiento del BID, en medio de un raquítico cuórum que impedía el avance de la agenda de proyectos pactada por los diputados para ese día.
Con ausencias incluso de jefaturas como las de Liberación Nacional (PLN) y Restauración Nacional (PRN), a la hora de que se intentó aprobar las mociones con las agendas, que incluían los créditos y otros planes, para el segundo debate, no se lograron los 38 votos, por la oposición del Partido Integración Nacional (PIN).
Los créditos del BID estarían destinados principalmente al apoyo presupuestario y el auxilio por los efectos de la pandemia de covid-19.
Se trata de dos financiamientos por $250 millones cada uno. Uno de ellos es complemento del programa de ajuste fiscal acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con un plazo de amortización de siete años, un periodo de gracia de tres años, a una tasa del 2,34%.
El segundo forma parte de un programa de apoyo a reformas y tendría un plazo de amortización de 20 años, con una tasa de interés del 1,19% y un periodo de gracia de 5,5 años.
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