Limón. Las lluvias, el exceso de humedad, la basura y, sobre todo, el descuido de los limonenses, está enfermando de dengue a los vecinos de esta provincia con más frecuencia que a quienes viven en otras partes del país.
Esas cuatro condiciones se han confabulado para ayudar a la proliferación del zancudo transmisor del virus: el Aedes aegypti, dijo la ministra de Salud, María del Rocío Sáenz Madrigal.
En el cantón central de Limón, una de cada cinco casas está llena de criaderos de ese zancudo: botellas, tarros, floreros, llantas y toda clase de basura que pueda guardar agua estancada.
Esta zona, además, concentra el 51 por ciento de los casos de dengue (1.499 enfermos) registrados en lo que va del año en todo el país: en total, 2.939 hasta el 12 de junio pasado.
Como resultado, la unidad de dengue del hospital Tony Facio de Limón ya no da abasto.
Las diez camas para atender enfermos se hicieron insuficientes y, ahora, un nuevo salón con otras diez está a la espera de las nuevas víctimas del virus.
El médico Guillermo Kivers Brunel describió la situación así: “La gente no deja que se enfríe la cama cuando ya llega otro enfermo a ocuparla”.
Ese hospital está atendiendo un promedio de 62 casos de dengue por semana. En los días más críticos hasta 15 casos sospechosos reciben tratamiento.
En lo que va del año, allí se ha internado a 334 personas con dengue clásico y cuatro con dengue hemorrágico.
A ver si acaso
Ante la situación, profesionales del Ministerio de Salud y de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) alertaron y pidieron a los lugareños eliminar criaderos.
Hasta ahora, la mayoría de la gente ha sucumbido a la versión clásica de la enfermedad, que se caracteriza por fiebre y dolor corporal. En todo el país, solo 7 han contraído dengue hemorrágico este año.
La próxima semana se hará una campaña de eliminación de criaderos en todo el cantón central de Limón, anunció la Caja.
Kivers Brunel advirtió que si la población no asume una posición de lucha frontal contra el mal, él no duda en que la situación se complique.
Las personas más afectadas con el virus son las que están en edad productiva (entre 20 y 59 años).
La situación más crítica se concentra en Limón, dijo Sáenz.
En el resto del país, la región Chorotega (Guanacaste) ha presentado 429 casos, y la Pacífico central (Puntarenas) 424 en lo que va del año.
En ambas zonas, la mayoría de los casos se ha atendido de manera ambulatoria (sin necesidad de hospitalización).
Por ejemplo, a estas alturas del año el hospital Enrique Baltodano de Liberia, aún no ha instalado la unidad de dengue pues no ha sido necesario, según informó el subdirector del hospital, Mario Angulo Jaubert. Lo mismo pasa en el hospital La Anexión, en Nicoya.
Las previsiones que tenían aquí era abrir la unidad de dengue en abril o mayo, pero hasta ahora no ha sido necesario ante los pocos casos que se han manejado, informó Agnner Angulo Leiva, asistente médico de la dirección médica de ese hospital.
Contrasentido
Según Anabelle Alfaro, experta de la CCSS en el manejo del dengue, llama la atención que la gente no haga nada por evitar la enfermedad, a pesar de que conocen todo sobre ella.
Según dijo, la población sabe cómo eliminar los criaderos y cómo son los zancudos transmisores pero, curiosamente, no ponen en práctica todo lo que conocen. Esto se determinó en un estudio hecho en Guanacaste este año.
Alfaro hizo un llamado a la población para prevenir las muertes que ya se han presentado en otros países, como Honduras.
En Costa Rica, desde que apareció el dengue en 1993 solo dos muertos se han registrado. La mayoría de personas ha desarrollado dengue clásico.
Las autoridades de la Caja y del Ministerio de Salud hacen lo posible por evitar que la enfermedad llegue al área metropolitana. Si esto sucede, el número de enfermos se dispararía y hasta podría haber víctimas mortales, estiman.
Colaboró la periodista Ángela Ávalos