Estambul AP, AFP Los Gobiernos occidentales restringen los derechos humanos y aprueban políticas erróneas en nombre de la seguridad, por miedo a los atentados terroristas y a la posible amenaza que planteen los refugiados, según un informe de una importante organización de derechos humanos.
En su informe anual, Human Rights Watch (HRW) critica a Europa y Estados Unidos por su “descarada islamofobia y desvergonzada demonización de los refugiados”, afirmó el director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth, al sostener que “genera precisamente la clase de división y hostilidad que a los reclutadores terroristas les encanta aprovechar”.
Entre las medidas adoptadas en Europa, HRW menciona la ley aprobada en Francia tras los atentados de París que prolongó el estado de emergencia, amplió el arresto domiciliario a toda persona sobre la cual existan razones serias de pensar que su comportamiento constituye una amenaza para la seguridad y el orden público, y simplificó los operativos policiales sin autorización judicial.
Informe. La organización presentó en Estambul su informe anual, que analiza las prácticas en materia de derechos humanos en todo el mundo. Turquía acoge a 2,2 millones de refugiados sirios y es el principal punto de salida para los migrantes que ponen rumbo a Europa con la ayuda de traficantes de personas.
En el mundo hay más de 60 millones de personas desplazadas por la guerra o la represión, precisó HRW.
Roth señaló en el texto que el millón de solicitantes de asilo que se estima llegaron por mar a Europa en el 2015 supondrían solo el 0,20% de la población de la Unión Europea si se estableciera un reparto de las reubicaciones.
“Crear una forma segura y ordenada para que los refugiados lleguen a Europa, reduciría las vidas perdidas en el mar y ayudaría a las autoridades migratorias a filtrar los riesgos de seguridad”, dijo Roth.
Los legisladores europeos y estadounidenses, afirmó, utilizan la amenaza terrorista como una oportunidad de expandir el poder de las agencias de la ley, lo que incluye el espionaje masivo.
Al convertir a los refugiados en “chivos expiatorios”, los países occidentales corren el riesgo de alejarse de “comunidades cruciales en sus esfuerzos antiterroristas” y apartarse del derecho humanitario internacional, advirtió Roth.
Por su parte, Rusia y China se embarcaron en la mayor campaña de represión sobre la sociedad civil en varias décadas, según el informe de más de 90 países. La organización identificó tendencias similares en Turquía, Kenia, Sudán, Sudáfrica e Israel.
Human Rights Watch celebró los avances de las comunidades de homosexuales, bisexuales y transexuales en el 2015, como la legalización del matrimonio homosexual en Irlanda, México y Estados Unidos. Mozambique despenalizó la homosexualidad.
Señaló también que una de cada tres niñas en el mundo en desarrollo se casa antes de los 18 años, y hay un millón de niños presos.
Con respecto a América Latina, el informe critica leyes aprobadas en Bolivia, Ecuador y Venezuela para controlar a activistas y a grupos independientes.