Congreso de Honduras arregla diferencias y promueve a Luis Redondo como único presidente

El nuevo acuerdo al que llegaron este lunes establece que el diputado Cálix se hará a un lado y renunciará a la presidencia del Congreso del país centroamericano, para que solamente quede en ejercicio la junta directiva de Luis Redondo, del Partido Salvador de Honduras (PSH).

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La crisis se desató días antes de la toma de posesión de Xiomara Castro, luego de que un grupo de disidentes de Libre desconocieran un acuerdo con el PSH, cuyo apoyo fue clave para ganar las elecciones de noviembre pasado. El pacto comprometía el apoyo a Redondo, del PSH, como jefe del Legislativo.

Algunos disidentes de Libre eligieron a Cálix, porque consideraban que el Congreso debía ser presidido por su partido, ya que es la bancada que cuenta con más diputados, con un total de 50. Sin embargo, los leales a Castro eligieron a Redondo, aunque pertenecía a otra fuerza política, para respetar el pacto electoral y garantizar la gobernabilidad.

Esto generó que el pasado 25 de enero ambos se proclamaran como presidentes del Congreso. Por un lado, en el edificio del Poder Legislativo tomó posesión el diputado Luis Redondo. Mientras, en forma paralela y vía Zoom, Jorge Cálix también instalaba su legislatura como jefe del Congreso, con una veintena de diputados disidentes de Libre y la mayoría de los legisladores del Partido Nacional y el Partido Liberal, opositores a Castro.

Según el acuerdo, los diputados disidentes, que fueron expulsados de Libre, se reincorporarán a las filas del partido y a todas las sesiones convocadas por el presidente legislativo Luis Redondo a partir del martes. Las bancada del Partido Nacional y el Partido Liberal también volverán a las sesiones legislativas.

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