EscucharLa curiosidad de un joven que pescaba en el golfo de Nicoya le permitió al país sumar una nueva especie de pájaro a la lista de aves presentes en nuestro territorio.
El albatros de Galápagos ( Phoebastria irrorata ) nunca se había hallado en el territorio continental de Costa Rica.
Solo una vez había sido observada en nuestro país, el 7 de mayo de 1993, pero fue en la isla del Coco y no hubo evidencia para comprobarlo.
El ave no fue descubierta, pues ya se conocía su existencia en las islas Galápagos y otras áreas del mundo.
Lo novedoso es que no es usual verla en nuestro país, detallan los especialistas.
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El albatrós de Galápagos fue visto por Keiner Berrocal el 9 de enero a 15 millas de cabo Blanco. Berrocal es un pescador artesanal que captura dorado con su padre. | KEINER BERROCAL PARA LN
Keiner Berrocal Chacón acompañaba a su padre en una jornada de pesca artesanal cuando vieron un ave que al joven le pareció curiosa, por lo que decidió fotografiarla. Sin embargo, el joven fue un poco más allá y envió la imagen a una red social sobre naturaleza de la zona.
“La subí a una página llamada Flora y Fauna de de Costa Rica que tiene un amigo mío, porque mi amigo me había dicho que cuando tuviera una foto que la subiera”, apuntó el joven.
Esto le permitió a los ornitólogos del país (rama de la ciencia que estudia las aves) determinar que teníamos un nuevo visitante en el territorio continental.
Por eso, esta fotografía es el primer “comprobante” de la presencia de esta ave en Costa Rica.
Hallazgo. Jorge Zúñiga López, aficionado a las aves y profesor de Berrocal en el Colegio de Cóbano, vio la fotografía que tomó su alumno y supo que era una especie extraña en nuestro país, por lo que remitió la imagen a la Asociación Ornitológica de Costa Rica (AOCR).
El Comité Científico de la AOCR determinó que efectivamente se trataba del albatros de Galápagos y la incluyó en la lista de especies avistadas en el país, ahora sí con una prueba gráfica.
Hace 21 años, Alejandro Acevedo-Gutiérrez observó un ejemplar de Phoebastria irrorata en las cercanías de la isla del Coco, pero no logró ofrecer un comprobante.
Aún así, Acevedo-Gutiérrez publicó un artículo en la revista Biología Tropical de la Universidad de Costa Rica y fue incluida en la lista oficial de las especies presentes en territorio nacional, pero todavía “sin comprobante”.
