El verano invita a ponerse el traje de baño y darse un buen chapuzón para aplacar el calor, pero, si no quiere sufrir emergencias, atienda algunos consejos básicos.
La sede Central de la Cruz Roja Costarricense, en San José, elaboró una lista de precauciones para quienes van al mar, ríos, lagunas o piscinas.
Quizás conozca este consejo, pero realmente es una regla de oro: si no sabe nadar, no se arriesgue, permanezca en la orilla.
Y si es muy ágil en el agua, tampoco se confíe. Lo mejor es que verifique la profundidad del lugar o si es común que existan corrientes marinas, ramas o rocas que puedan golpearlo cuando se zambulle.
"Tampoco es aconsejable nadar inmediatamente después de comer. Lo mejor es esperar unas dos horas; de lo contrario, se corre el riesgo de sufrir una congestión", comentó la cruzrojista Gina Salazar, quien lanzó otra advertencia para aquellos que toman licor y luego van a nadar.
Con pies de plomo
Los cuidados no solo deben darse dentro del agua, sino también fuera de ella.
Cuando camine sobre la arena, no lo haga descalzo y asegúrese de que no existan residuos de latas, vidrios u otros objetos con punta que puedan provocarle heridas.
Salazar agregó que cualquier juego debe hacerse con precaución, para no provocar heridas o golpes dolorosos.
Algunas emergencias menores, como pequeñas heridas o golpes, usted podrá atenderlas si recibe la información adecuada y cuenta con un buen botiquín (Vea recuadro aparte).
En caso de quemaduras solares, aplique agua a temperatura ambiente. "Nunca hay que aplicar agua fría porque empeora la situación", advirtió Salazar.
Otro buen consejo, agregó la cruzrojista, es aplicar clara de huevo sobre la zona quemada o sábila para "refrescar" la piel y combatir la resequedad.