El clásico del cine El fantasma de la ópera (Estados Unidos, 1925) será musicalizado en vivo por un pianista costarricense, este sábado 3 de agosto en la Sala Garbo.
La película se proyectará en esa sala josefina a las 6 p. m. como parte del programa de cine club Mi Butaca, que exhibirá el largometraje en formato mudo para que sea reinterpretado musicalmente por el costarricense Sebastián Álvarez.
“Mi Butaca Cine Club ofrece el último martes de cada mes una función con música en vivo. Esta será una presentación especial y de lujo de esta joya del sétimo arte”, comentó Gonzalo Montero, de Mi Butaca Cine Club.
Según dijo Montero, con el pianista trabajan desde el 2012 en este tipo de proyecciones. Por ejemplo, para la de este sábado, Sebastián Álvarez compuso toda una pista musical para el filme.
“Cualquiera puede musicalizar una película muda en este momento, pero otra cosa es contar con una preparación de siete años para hacerlo porque implica estudiar las películas y saber cómo esto se hacía en los años 20, porque significa reinterpretar el sentimiento de cada escena”, subrayó Montero.
Gonzalo Montero comentó que previo a cada película se toman unos minutos para conversar con los espectadores y darles las herramientas necesarias para que disfruten de la mejor manera la obra que se proyectará. Posterior a la exhibición habrá un cine foro o conversatorio donde los asistentes pueden comentar y hacer preguntas.
“Esta película, dirigida por Rupert Julian, tiene un par de escenas donde su utilizó por primera vez en un estudio cinematográfico el sistema Technicolor; así que, además de disfrutar de esta excelente película, seremos testigos de las primeras escenas a colores de la historia del cine. El resto de las escenas cuentan con tintes originales que la provee de una ambientación sumamente artística y especial”, agregó Montero.
Por su parte, el pianista Sebastián Álvarez, de 22 años de edad, dijo que la interpretación que hará a piano es de música original y compuesta por él.
“Yo compongo la pieza musical de toda la película y en cada escena la interpreto musicalmente mientras la película corre. Esto conlleva todo un trabajo porque requiere estudiar la película con mucha antelación, ponerme en los zapatos de cada personaje y traer eso a flote para que el público lo pueda ver y sentir como tal. La meta principal es hacer que el público se sienta parte de la película”, dijo Álvarez.
Continuó: “Lo que la gente puede esperar (de la presentación del sábado en Sala Garbo) es sentirse como si estuvieran escuchando una pieza original de la misma película”.
Será la primera reinterpretación que Álvarez hace de El fantasma de la ópera, aunque sí ha trabajado varios otros filmes con el mismo formato.
La entrada a esa presentación tiene un precio de ¢2.000 por persona y la venta se habilitará media hora antes de la función en la boletería de la Sala Garbo.