EscucharLimón cumplió este viernes 25 días de cerco policial. Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), uniformados de Fuerza Pública y fiscales trabajan en conjunto para desplegar operativos contra el narco y la delincuencia organizada y para detener en flagrancia a los delincuentes. Todo con un objetivo común: atacar la criminalidad y bajar los homicidios en la provincia y el país en general.
Los primeros resultados de estos operativos conjuntos, desplegados desde el 22 de mayo, trascendieron este viernes. Por ejemplo, el cantón central de Limón, que es el más violento del país en materia de homicidios, pasó de 2,2 asesinatos por semana, a uno.
Entre el 1.° de enero y el 24 de mayo esa comunidad acumuló 44 homicidios, en cambio, en los últimos 22 días solo registró tres. El director del OIJ, Randall Zúñiga, afirmó este viernes que, de seguir así, se puede cerrar el año con menos de 800 asesinatos, en lugar de la cifra cercana a 900 que las proyecciones marcaban semanas atrás para este 2023.
El fiscal adjunto Mauricio Borashi destacó que en tres semanas se ha procesado a 40 personas en los tribunales de flagrancia por casos de armas, drogas, violencia doméstica y robos agravados, entre otros. Gracias a la reactivación de esos tribunales, se procesa de forma rápida a las personas sorprendidas en plena acción delictiva.
Entre las causas tramitadas por flagrancia en Limón, algunas de ellas con sentencia, Boraschi citó las de personas a las que les decomisaron 14 fusiles de asalto, así como a un policía penitenciario que intentó introducir droga a la cárcel de Limón y la de tres sujetos detenidos por robo agravado en Puerto Viejo de Cahuita, dos de ellos aceptaron los cargos y ya tienen sentencia.
También destacó seis allanamientos para desarticular grupos de sicariato, con lo que se busca disminuir el accionar de esas agrupaciones delictivas y devolver a la policía el control territorial de Limón.
El ministro de Seguridad, Mario Zamora, indicó que aunque inicialmente se hablaba de 100 días, los diferentes cuerpos policiales estarán en el Caribe el tiempo necesario hasta que deje de ser el punto crítico que constituye en la actualidad.
Comparó la situación de Seguridad en el país como una paciente con un cáncer agresivo al que se está sometiendo a las primeras quimioterapias para tratar de revertir el avance del mal y devolverle la salud. Insistió en que a pesar del tratamiento el cáncer sigue ahí y amenaza con reactivarse cada vez que las autoridades se descuiden, por eso desarrollan un trabajo las 24 horas del día, dentro del marco de la institucionalidad.
Lo novedoso del proyecto, en relación con anteriores incursiones, está en que por primera vez hay una coordinación con el aparato judicial pues equipos de inteligencia del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), así como un equipo reforzado de fiscales y jueces, trabajan para sacar de las calles y procesar judicialmente a las bandas de narcotráfico, lavado de dólares y crimen organizado, así como a los sicarios que les colaboran.
Las autoridades buscan demostrar en Limón que, con los recursos suficientes, se puede revertir el alza en homicidios, principal parámetro internacional para medir la criminalidad de un país. La tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes determina la peligrosidad de una nación y eso influye en el turismo, la inversión de empresas extranjeras y la generación de más empleos. Lo ideal es que la tasa no supere valores de 10, pero el año pasado fue de 12,3 y en la actualidad es más elevada.
Recuperar terreno perdido
Con base en la historia de otros países, el ministro Zamora, quien asumió funciones apenas el 10 de mayo pasado, afirma que estamos ante un fenómeno de estructuras criminales que cuando logran adueñarse de territorios, de seguido le declaran la guerra a las propias fuerzas del orden público.
“Si este fenómeno se sigue “mexicanizando y colombianizando”, vamos a tener una realidad muy distinta a la que hemos conocido en el país. “En el momento histórico en que estamos, tenemos que actuar de una vez, porque después puede ser demasiado tarde”, aseveró.
El jerarca pidió el apoyo de la ciudadanía para denunciar los hechos delictivos que conocen y participar como testigos en los procesos de judicialización contra particulares o contra organizaciones criminales.
Sobre la posibilidad de extender acciones similares a las de Limón a otras zonas de alta criminalidad, las autoridades hacen un llamado a dotar de recursos a los diversos cuerpos policiales y al Poder Judicial para contar con el personal que permita replicar acciones como la de Limón en otras provincias.
El fiscal Mauricio Boraschi, indicó que la modalidad de flagrancia podría fortalecerse también en San José, para que quienes sean sorprendidos delinquiendo y con pruebas a mano puedan ser presentados rápido ante un juez, pero ello exige más recursos para la Fiscalía.
“El éxito de esto es la presencia policial y por eso el clamor de invertir más en seguridad”, dijo Boraschi.
Agregó que en San José, desarrollan una serie de trabajos para la desarticulación de organizaciones de narcotráfico relacionadas con asesinatos por ajustes. Esperan lograr un descenso de la tasa de homicidios pues Limón y San José con más de 100 homicidios cada una, tienen más de la mitad de los 400 casos ocurridos en todo el territorio hasta este viernes.
