Río de Janeiro. EFE El delantero uruguayo Luis Suárez podría recibir una dura sanción por morder al defensa italiano Giorgio Chiellini el martes pasado, en el partido que la Celeste venció a Italia 1-0 y clasificó a octavos de final.
La FIFA informó ayer que actuó de oficio y abrió procedimientos disciplinarios contra Suárez por “transgredir el artículo 48 y/o 57 del código disciplinario”.
La delegación uruguaya, por su parte, presentó ayer un texto de descargo y un vídeo al Comité de Disciplina, que incluye la polémica jugada y agresiones e insultos contra Suárez por parte de los futbolistas suplentes italianos.
Suárez presentó además sus descargo personales a través del presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Wilmar Valdéz, y del secretario general, Alejandro Balbi, quien también es el abogado del futbolista.
Luego de entregar el alegato de defensa del jugador ante la FIFA, Valdez aseguró a canal 10 de Uruguay que confía en que el Pistolero sea absuelto por la FIFA, ya que “no hay una prueba suficiente” de que haya mordido al zaguero italiano.
Los expertos en reglamentos de la AUF confían en que el caso pueda ser zanjado con una amonestación para Suárez, aunque una eventual sanción dejaría al delantero por lo menos fuera del partido de octavos de final ante Colombia.
El nuevo episodio de Suárez tuvo amplio impacto en las redes sociales con dos millones de tuits, y en la prensa deportiva mundial.
Los periódicos uruguayos celebraron la épica clasificación de la Celeste y lamentaron el regreso de Suárez “a las locuras”, al aludir que es la tercera vez que el delantero protagoniza un episodio similar.
Hasta el presidente uruguayo José Mujica salió en defensa del artillero de 27 años.
“Nosotros (a Suárez) no lo elegimos ni para filósofo, ni para mecánico, ni para tener buenos modales. No le perdonan los defectos que tiene. Yo no vi que haya mordido a nadie. Pero se pegan cada patada, y cada hachazo y se los bancan (aguantan)”, afirmó.
En cambio, la prensa británica, que tiene en el uruguayo un blanco habitual de sus críticas, mostró consenso al pedir una sanción.
Suárez fue suspendido 10 partidos en abril de 2013 por una agresión similar durante un choque de la Premier League, y en el 2010, cuando jugaba con el Ajax de Amsterdam holandés.