EscucharLa madre de un gestor de medicamentos de la Caja Costarricense de Seguro Social es tesorera de Selah Medical Supply, empresa subsidiaria de Seven Pharma Ltd., proveedora a la que se le han hecho compras urgentes por ¢171 millones en los últimos seis meses. En el mismo período, Alpha Pharma Int., empresa hermana de Seven Pharma, facturó ¢87 millones.
Como gestor de medicamentos, Hans Vindas Céspedes hace estudios de mercado para decidir a quién comprar los fármacos faltantes. Su intervención es necesaria para enfrentar urgencias y desabastecimientos. Por eso, las compras no siguen los trámites usuales, en particular los controles establecidos para la contratación administrativa.
La madre de Vindas sabe muy poco de Selah y remite a su hijo para obtener información. El funcionario tampoco admite saber mucho, pues se trata, según dijo, de asuntos propios de su madre. La presidenta de Selah no se mostró dispuesta a describir la actividad comercial de la firma y ni siquiera quiso revelar el domicilio actual.
Hay un profundo silencio en torno a la compañía y solo queda a la luz pública una inquietante cadena de coincidencias. En mayo, Vindas viajó a la India. Visitó Nueva Deli y Hyderabad, capital de Andhra Pradesh, sede de Seven Pharma. Dice haber viajado hasta allí por placer, sin saber que su madre es tesorera de una empresa domiciliada en el sitio y sin conocer a Murali Krishna Bheemireddy, empresario de la india vinculado con las dos empresas proveedoras de medicinas urgentes a la Caja y también a la sociedad donde figura la madre de Vindas.
Las coincidencias son suficientes para despertar el interés de la auditoría institucional, cuyos estudios ya están en camino. Vindas fue trasladado de puesto y dice estar en espera de la oportunidad para presentar sus pruebas. La actuación del funcionario no tardará en quedar esclarecida, pero el caso llama la atención sobre la habitualidad de este tipo de transacción en la Caja y las oportunidades creadas para la mala gestión.
De las 335 compras de medicamentos ejecutadas entre enero y junio de este año, casi la tercera parte (103) se hizo por el procedimiento de urgencia. El mecanismo puede ser aplicado cuando las existencias no alcancen para asegurar el abastecimiento durante dos meses. A partir de ese momento, se hace la compra directa o se amplía el contrato del proveedor.
La auditoría investiga tanto las compras urgentes como las ampliaciones, porque en ambos casos hay oportunidades de introducir anomalías. Son investigaciones de gran importancia para la salud de la institución, tan sumida en crisis y con tantas vulnerabilidades como se han venido demostrando en las últimas semanas. Sin embargo, es importante investigar también la responsabilidad de los encargados de planificar el abastecimiento. Al 9 de agosto, la lista de fármacos contenía 118 productos con existencias insuficientes para dos meses.
La intervención de la auditoría parece orientada en ese sentido porque, amén de la oficina de Gestión de Medicamentos, los investigadores revisan el Área de Planificación de Bienes y Servicios. Ambas son dependencias de la Gerencia de Logística, cuya labor merece un estricto escrutinio porque, en palabras de los auditores, las compras de medicamentos son “un riesgo” para la Caja. Además, entre los temas a investigar están la “planificación” y el “desabastecimiento”.
La oportunidad de utilizar los mecanismos de urgencia sin aplicar los controles habituales surge cuando la mala planificación desemboca en desabastecimiento. Por eso, las compras y sus posibles anomalías no deben verse desligadas de los pasos previos en la logística institucional. Ojalá la investigación sirva para sentar las responsabilidades que existan, pero también para corregir los sistemas porque, a fin de cuentas, en ellos están las soluciones de largo plazo.
Un informe de auditoría esclarecedor del caso concreto, pero ayuno de proyección sobre los procedimientos de la Caja, sería a todas luces insuficiente. También es de vital importancia el seguimiento a las recomendaciones surgidas del estudio para asegurar su adopción. La constatación de las mejoras no parece difícil pues tiene que ver con el número de compras directas y ampliaciones de contrato autorizadas en el futuro.
