Columnistas

Entre líneas: Expresiones odiosas

Si la garantía del derecho a la libertad de expresión se extiende a manifestaciones tan deleznables como negar el monstruoso Holocausto, el ejercicio más valioso y útil del debate público está a buen resguardo.

EscucharEscuchar

“Los malos casos hacen buena ley”, dicen los defensores de la libertad de expresión en Estados Unidos. En el sistema de precedentes jurisprudenciales, el significado de la frase es claro. Cuando fallan un caso, los jueces establecen criterios aplicables en el futuro y en las Cortes inferiores. Si la Corte Suprema establece la necesidad de probar dolo para acreditar la responsabilidad de un informador acusado de difamación, esa será la ley y los jueces deberán aplicarla, como sucede desde 1964 cuando el caso New York Times Co. vs. Sullivan estableció la doctrina de la real malicia.








Armando González R.

Armando González R.

Laboró en la revista Rumbo, La Nación y Al Día, del cual fue director cinco años. Regresó a La Nación en el 2002 para ocupar la jefatura de redacción. En el 2014 asumió la Edición General de GN Medios y la Dirección de La Nación. Abogado de la Universidad de Costa Rica y Máster en Periodismo por la Universidad de Columbia, en Nueva York.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.