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Cuando papá y mamá buscan el mejor centro educativo para sus hijos, rara vez preguntan por programas que promocionan y protegen su salud mental. Generalmente, se fijan en las materias que cursarán, los idiomas que aprenderán o los deportes y actividades artísticas que practicarán.
En una época en la que hay un riesgo aumentado de autolesiones, depresión o ideación suicida, trastornos alimentarios y acoso escolar en niños, niñas y adolescentes, papá y mamá también deberían prestar atención a los programas dirigidos a proteger y promocionar la salud mental que ofrecen escuelas y colegios.
La psicóloga Jackie Solano advierte que muchos padres de familia se empiezan a preocupar por estos asuntos cuando su hijo o hija está en un centro educativo en donde es víctima o testigo de acoso, agresiones y relaciones tóxicas.
Ningún centro educativo, asegura Solano, tiene programas para medir el riesgo de problemas de salud mental en su población, tanto escolar como docente o administrativa.
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La mayoría, afirma, ofrece programas enfocados en valores, en gestión de las emociones o en educación sexual, pero no están en capacidad de medir el riesgo, promocionar la salud mental y prevenir situaciones como las que acosan cada vez más a los menores de edad: trastornos de ansiedad y de la personalidad, depresión o ideación suicida.
¿Cómo pueden los papás afinar ese radar a la hora de seleccionar el centro educativo que no solo ofrezca una buena propuesta académica, sino que también sea un espacio seguro para sus hijos?
“Siempre le pregunto a los padres qué es lo que realmente quieren: ¿Un chico graduado de la NASA o uno feliz? ¿Quieren una persona funcional o una que sepa varios idiomas y te recete historia de principio a fin? ¿Alguien que se pueda relacionar con otro y desarrollarse en un trabajo de forma eficiente?
“Si usted está pensando que su hijo es una persona con el derecho a ser feliz, piense en un centro educativo que promueva otras áreas, no solo la académica. Que le permita a los niños desarrollarse por medio de proyectos y el autoconocimiento, y que tenga en su malla curricular programas para desarrollar las emociones, la autoestima y las relaciones con otros”, aconseja la psicóloga.
Los menores pasan la mayor parte del tiempo en el centro educativo. Por eso, también es importante que quienes trabajen ahí sepan cómo gestionar si ocurre una situación relacionada con cutting, suicidio o intento de suicidio.
¿Se ha preguntado usted, como padre o madre, si las personas que pasan tiempo con sus hijos están realmente preparadas para entenderlos y mostrar empatía en situaciones de crisis?, pregunta Solano.
¿Por qué no solicitar el currículum de los profesores, además de la lista de útiles escolares? ¿O asegurarse de que el centro educativo haya evaluado y garantizado que los docentes estén en buen estado de salud mental?, recomienda la psicóloga.
Para saber qué más deberían pedir los padres a un centro educativo en materia de salud mental, y cómo una escuela o colegio podría capacitarse para ofrecer este tipo de apoyo, escuche la entrevista completa con Jackie Solano en este episodio de “Estar Bien”.
