Un daño en un disco duro mantiene al Hospital Nacional de Niños sin poder consultar el 100% de las radiografías y tomografías realizadas antes de marzo de este año.
Para solucionar el problema, el centro médico echó mano de un disco duro en el que mantiene respaldos de los exámenes médicos y corre para cargarlos a Syngo, el sistema informático que utiliza el personal para visualizar las imágenes médicas.
Ese proceso podría tardar tres semanas más, declaró Carlos Jiménez, subdirector del centro médico.
No obstante, miles de pacientes permanecen sin acceso a sus radiografías y tomografías, lo cual pone en riesgo su salud, pues limita la capacidad diagnóstica de los doctores, la revisión de tratamientos y hasta la toma de decisiones quirúrgicas en todas las especialidades médicas.
“Es terrible; es terrible, lo reconozco, porque hay muchas especialidades en las cuales las decisiones y la evolución de los pacientes dependen de lo que los médicos van viendo en las imágenes médicas”, declaró Olga Arguedas, directora del hospital.
Por ejemplo, no contar con tomografías impide precisar la evolución de un tumor o determinar si un tratamiento está dando resultados.
Esa situación la enfrenta una familia que mantiene a su hijo en revisión por un cáncer.
El padre del menor –que pidió no revelar su identidad– relató a La Nación que hace tres semanas acudió al departamento de Archivo para obtener una copia del expediente médico de su hijo, pero se topó con la sorpresa de que varias tomografías no estaban disponibles.
“Primero –dijo–, queríamos tener todo el expediente porque tenemos derecho de tener esos exámenes y, segundo, queremos obtener un criterio médico fuera de la Caja”.
Agregó que han recibido poca información sobre qué es lo que pasa con las tomografías.
“Ha habido escasez de comunicación con nosotros. Saber que no se pueden comparar las tomografías porque no están disponibles es para mí una falta grave. Nos enteramos de esta situación porque solicitamos el expediente. De lo contrario, ni nos enteramos.
“No nos dan certeza de qué va a pasar o qué fue lo que pasó, no tenemos certeza de nada”.
La directora del Hospital Nacional de Niños subrayó que las evaluaciones médicas no se perdieron, sino que están en un proceso de recuperación.
“Las imágenes de marzo para atrás las están reconstruyendo a partir del disco duro de respaldo para que puedan ser visualizadas en Syngo, pero las imágenes están ahí, no se han perdido.
“Los informáticos me lo explican así: todas las piecitas del rompecabezas están en el disco duro. Esas piecitas ellos tienen que pasarlas al sistema informático para convertirlas en imágenes que estén a disposición del personal y esa transición es un poco lenta porque son muchas imágenes”.
Añadió que si existe un caso urgente, pueden pedirle a los técnicos que prioricen la recuperación de esos exámenes médicos.
No obstante, la versión del papá consultado por La Nación dice lo contrario.
Asegura que ha solicitado, al menos, cinco veces, las tomografías de su hijo y las respuestas han sido negativas.
“Estamos bastante preocupados porque es una enfermedad grave y saber que no tenemos información valiosa para conocer cómo ha evolucionado mi hijo es bastante preocupante”, comentó.
Desconocen las causas
¿Por qué falló el disco duro? ¿Cuál es la causa del problema? ¿Por qué es tan lento el proceso para recuperar las radiografías y tomografías? Ninguna de esas preguntas tiene respuesta clara.
Carlos Jiménez, subdirector del hospital, admitió que, hasta ahora, desconocen las razones del inconveniente.
“¿Por qué ocurre ese daño? Creo que las causas pueden ser muchísimas. Deterioro por el tiempo, cambios de voltaje; no podría decir yo cuál fue la razón que provocó el problema”.
LEA MÁS: Hospital Nacional de Niños atiende primer caso de extraño síndrome relacionado con covid-19
¿Cuántas radiografías y tomografías deben ser restauradas? ¿Cuántos son los pacientes afectados? La entidad tampoco puede responder con exactitud esas interrogantes.
De acuerdo con la institución, días atrás solicitaron un informe por escrito para definir las causas.
“En el día a día esto afecta los estudios comparativos que se tienen que hacer a los pacientes con análisis de años anteriores. Por ejemplo, los pacientes que se controlan en especialidades como Oncología y Neurocirugía, fundamentalmente; ahí se tratan pacientes que tienen una arquitectura alterada por una cirugía y es importante comparar estudios antiguos con estudios actuales”, aseveró el subdirector.
Además, afirmó que esta circunstancia perjudica la toma de decisiones de los médicos a la hora de diagnosticar o disponer tratamientos.