El diputado del oficialista Acción Ciudadana (PAC) Víctor Morales Zapata, confirmó que contratará en su despacho al miembro de la Juventud Progresista del PAC, Mariano Salas, despedido por el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, el pasado 13 de julio.
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Salas había laborado como jefe de despacho del ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, hasta que trascendió la minuta de una reunión de la Juventud Progresista en la que se habría acordado "aprovechar los recursos políticos del Gobierno para beneficio partidario y de la Juventud Progresista (JP)".
Cuestionado sobre si es un acto de provocación contra el presidente Solís, el diputado Morales dijo que no es esa la intención, aunque no puede controlar la forma en que sea interpretado por otros actores políticos.
La contratación tuvo el respaldo del jefe de fracción del PAC, Marco Vinicio Redondo, quien envió la solicitud de contratación este martes al Directorio Legislativo.
El primer secretario del Directorio, Juan Marín, del PLN, confirmó que la contratación quedó en firme este mediodía.
Además de Mariano Salas, Solís ordenó el cese de los funcionarios Cindy Taco, entonces asesora de la viceministra de la Presidencia, Ana Gabriel Zúñiga; además de Randall Céspedes, de la oficina de Atención Ciudadana y Éder Artavia, de Servicios Generales, quienes también participaron en la reunión de la Juventud Progresista del PAC.
Otros dos miembros de la Juventud Progresista presentes en la reunión salvaron sus puestos, ya que a diferencia de los cesados, trabajan en el Congreso, donde en una decisión dividida, los diputados del PAC optaron por no despedirlos.
De esta forma, tanto Eduardo Solano (actual secretario general interino del Partido, como Óscar Jiménez, quien es miembro de la Asamblea Nacional, mantuvieron sus puestos en el Congreso.
La decisión planteó una diferencia de criterios entre un sector de la fracción del PAC y el presidente Solís.