Luis Guillermo Solís llegó hoy a su primer día de trabajo como Presidente de la República poco después de las 8 a. m. y se presentó ante el personal de la Casa Presidencial, al cual le pidió lealtad y confianza.
"Espero del personal de esta Casa la mayor lealtad. Si no, es imposible resguardar el patrimonio que el pueblo me ha entregado", les dijo Solís a los funcionarios, al tiempo que agradeció a quienes trabajaron para Óscar Arias, Laura Chinchilla y otros expresidentes.
"Sé que aquí hay personas de todos los partidos", afirmó el mandatario, quién dijo que no tiene intención de perseguir a nadie, pues su Gobierno "es ecuménico".
"No quiero que se sientan alejados", les dijo.
Añadió que primero vienen momentos para hacer ajustes. "Ni siquiera sé dónde está la cocina. ¿Dónde está el baño?", bromeó el presidente. "Haremos algunas diabluras como corresponde, todo mundo a trabajar".