Hollande y Sarkozy, ambos de 57 años, se enfrentarán el 6 de mayo en la segunda vuelta electoral, de importancia capital en Europa ante el actual contexto de crisis de la zona euro, pero la dinámica es favorable al socialista, que puede contar con la reserva de votos de los otros candidatos de izquierda y de los ecologistas.
El presidente saliente tendrá por su lado el desafío de atraer al centro y a la extrema derecha, que cosechó el mejor resultado de su historia.
La otra ganadora de esta elección, aunque haya quedado fuera de la contienda, fue Marine Le Pen, de 43 años, que llegar en tercer lugar con un resultado (17,3 a 18,5%) nunca antes obtenido por su partido de extrema derecha, el Frente Nacional.
El candidato de la izquierda radical Jean-Luc Mélenchon fue cuarto, con alrededor de 11% de los votos, y llamó inmediatamente a "derrotar a Sarkozy".
El centrista François Bayrou quedó quinto, con cerca de 9%.
Muy por detrás, figura la ecologista Eva Joly (2%), que instó a votar por Hollande en la segunda vuelta.