San José
La compañía taiwanesa HTC presentó ayer un teléfono inteligente creado para quienes gustan de tomarse fotografías de sí mismos y luego embarrar todo Internet con ellas. Allí donde otros fabricantes le fallan a este propósito con cámaras frontales mediocres, HTC podría lograrlo: ayer presentó un teléfono con cámara frontal de 13 megapixeles (MP) y también introdujo una cámara portátil que parece un inhalador concebida para la era del 'selfie'.
El nuevo teléfono se llama HTC Desire Eye, pesa solo 154 gramos y posee dos cámaras de 13 megapixeles cada una y ambas equipadas con un flash dual de tecnología LED. Su pantalla es de 5,2 pulgadas de largo en diagonal, funciona con sistema Android 4.4 KitKat y la interfaz de HTC Sense 6.0; lo mismo que su teléfono insigna el HTC One M8.
El aparato incluye un procesador de 2.3 Gigahercios y 2 Gigabytes de memoria RAM. Se venderá con una única opción de almacenamiento: 16 GB.
El dispositivo también es contra agua y, afirma HTC, puede sobrevivir 30 minutos bajo el agua a un metro de profundidad gracias a su cuerpo de plástico. Su principal atributo, es evidente, reside en su cámara frontal para tomarse 'selfies'.
El teléfono se estaría comercializando a finales de mes en Norteamérica y Europa y, por ahora, no hay señas del precio pero sería más barato que el HTC One de la empresa al ser el Desire Eye un teléfono de gama media más barato.
De paso, la compañía lanzó una cámara para mano llamada Re y de 16 megapixeles. Según como se vea luce como un pequeño periscopio de submarino o un inhalador. Funciona a control remoto con un teléfono inteligente, sea Android o iPhone, y parece concebida para competir contra las populares cámaras para documentar aventuras personales GoPro. Sin embargo, la Re no es una cámara para deportes extremos; es para las de personas comunes y corrientes menos sedientas de adrenalina.
Costará $199.99 y posee un botón de disparo al frente y atrás, unas luces indicadoras LED y también es contra agua. Aguanta selfies en piscinas, lagos, pozas y ducha. Debido a su diseño minimalista, no trae pantalla o interfaz gráfica: solo un lente fijo capaz de tomar vídeo en alta definición 1080p y las fotografías de hasta 16 MP.
Incluye una ranura de MicroSD la cual permite expandir hasta 128 GB pero, de fábrica, el aparato llega con una tarjeta de almacenamiento de 8 GB. También posee un generoso abanico de formas de conexión: Bluetooth de Baja Energía, Wi-Fi, Wi-Fi-Direct y un puerto MicroUSB para cargarlo.
Todas esas opciones para conectividad son deseables porque depende por completo de un teléfono para que el usuario pueda usar la cámara. Al enlazar el dispositivo a un teléfono con la aplicación Re (para Android o iOS) para observar lo que el usuario está fotografiando en ese momento y, si así se desea, guardar todo vídeo o fotografías en el teléfono.
Disponible ya para pre-orden en el sitio de HTC, saldrá a la venta para la temporada de compras navideñas.