La ausencia de un dictamen psiquiátrico obligó al Tribunal Penal de San José a suspender ayer el inicio de las conclusiones y la lectura de la sentencia por el homicidio de Alice Patricia Fallas Rivera, de 27 años, conserje del Hospital de la Mujer.
La víctima murió , el 6 de enero del 2011, de una puñalada en el pecho en plaza González Víquez, San José, cuando fue atacada por un asaltante, capturado dos semanas después en Alajuelita. La Policía lo identificó con el apellido Jiménez (23 años).
Luis Diego Álvarez, defensor del imputado, señaló que él había solicitado el dictamen psiquiátrico desde abril del 2011, pero el Tribunal no respondió a su gestión.
Ayer, durante la incorporación de la prueba documental (acto previo a las conclusiones), Álvarez pidió a los jueces Karen Valverde, Gloria Rojas y Fernando Chacón que gestionaran ese examen.
La jueza Valverde reconoció que hubo una omisión, pero también recriminó al defensor el haberse esperado hasta las conclusiones, casi un año después de su solicitud, para recordar que faltaba ese dictamen de psiquiatría forense. El debate continuará el 14 de febrero.
Declaraciones. Durante el debate, declararon varios testigos que vinculan a Jiménez con el asesinato de la conserje, entre ellos, el taxista Alexander Méndez, quien rindió ayer su versión durante más de una hora.
Según dijo, él pasaba por el lugar donde ocurrió el crimen y pudo observar cuando Jiménez apuñaló a la mujer. Méndez reconoció al sospechoso ayer en la sala de juicio.
Añadió que él le tiró el carro encima al sujeto cuando agredió a Fallas, pero escapó a pie. Durante la huida, otros testigos manifestaron que Jiménez se subió a un bus gritando: “¿Por qué la maté?”.
Cecilio Carpio, un exvecino del sospechoso, declaró el miércoles al Tribunal y dijo que, el día del asesinato, él caminaba con su perro por el barrio El Carmen y, de pronto, se topó con Jiménez, quien iba sin camisa; el sospechoso le dijo: “Deme una ‘teja’, es que dejé acostada a una hembra y me están siguiendo”.