Mujer habría planeado junto a amante matar a su esposo para dejarse bienes

De acuerdo con la investigación realizada por los agentes judiciales de San Ramón, el 21 de abril del 2021 Solano fue con la hoy aprehendida, de apellido Blanco (26 años); el padrastro de ella, apellidado Murillo (43 años), y otros familiares a una propiedad que tenía en La Tigra de San Carlos, Alajuela. Cuando venían de regreso, todos pasaron a un restaurante en el poblado de los Ángeles Norte, del distrito de los Ángeles de San Ramón.

En determinado momento, indicó la Policía Judicial, un sujeto en bicicleta, con un bolso de repartidor de comida, llegó al comercio, descendió del vehículo y se acercó a Solano, a quien le disparó en múltiples ocasiones. Las heridas de bala le causaron la muerte en el sitio y, desde ese instante, las autoridades analizaron diversas hipótesis para esclarecer el crimen.

Fue así como estimaron que, aparentemente, el fin de dar muerte al hombre era que su esposa se quedara con los bienes muebles e inmuebles que él tenía. Asimismo, se estableció que el joven que habría disparado, de apellido Mora (23 años), es el actual novio de la mujer.

“Según la investigación, la esposa del fallecido participó en la parte intelectual del homicidio con su padrastro y el que dispara es su actual novio. Se realizan las detenciones en dos allanamientos, uno en la casa en la que habitan Blanco y Mora y otro en la vivienda de Murillo. También se allanó el inmueble en La Tigra que, al parecer, había adquirido el fallecido”, explicó el OIJ por medio de su oficina de prensa.

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Hace tres días, la Policía Judicial había difundido un video en el que se observa un carro de color negro que, se cree, venía persiguiendo a Solano y su familia. Además, en algunas imágenes se ve a Mora, el presunto gatillero, buscando un refresco y en otras se muestra una bicicleta y el un bolso de una aplicación de repartidores de comida que fueron abandonados poco después del ataque.

Pablo Calvo, jefe del OIJ de San Ramón, dijo el viernes pasado que Yefry Solano, de 31 años, estuvo en prisión y que, presuntamente, mientras estuvo ahí formó parte de una organización que se dedicaba a cometer fraudes telefónicos.

Inicialmente, se creía que el homicidio podía estar relacionado a esa actividad delictiva que desarrolló el hombre en la cárcel, pero esa hipótesis fue descartada.

La mujer y los dos hombres sospechosos de este asesinato fueron pasados al Ministerio Público, donde serán indagados y puestos a las órdenes del Juzgado Penal para la audiencia de solicitud de medidas cautelares.