
Un estudio de la Universidad Nacional (UNA) del año 2016, estimó que un 15% de los costarricenses que laboran sufren de estrés causado por el trabajo. Entre las causas se mencionan: alto ritmo de trabajo, pocas pausas, tiempos cortos para realizar las tareas, trabajo monótono, poca posibilidad de innovar, mínima opción de desarrollo y poco apoyo de jefes y compañeros. No obstante, hoy, en el contexto del covid-19, puede que este dato haya aumentado.
El estrés no solo afecta la salud psiquiátrica de las personas, además, es un factor de riesgo para sufrir de las Enfermedades Cardiovasculares (ECV).
Las ECV causadas por el estrés se manifiestan principalmente a través de aumento de presión arterial. Durante un episodio en el que un trabajador esté sometido a altos niveles de presión, se liberan más hormonas, lo cual puede dañar la capa interior de las arterias y formar coágulos. Estos podrían obstruir las arterias y ocasionar un ataque al corazón. Hay una estrecha relación entre el síndrome de Burnout o de agotamiento laboral y las patologías que afectan al corazón.
Existen algunas señales de alarma que pueden presentarse como:
- Fatiga constante
- Sudoración continua
- Molestias gastrointestinales
- Necesidad de consumir alimentos en exceso
- Insomnio constante
- Tics nerviosos, irritabilidad y/o déficit de concentración
Escuche su organismo y dele un respiro
Para evitar las complicaciones causadas por el estrés laboral, el especialista hace un llamado para concientizar a la población costarricense, con una serie de recomendaciones útiles para el manejo del estrés durante esos momentos en que el trabajo abruma en cantidad:
- Priorizar, ordenar y decidir: organizar las tareas que se deben hacer con urgencia y cuáles pueden esperar. La precisión en sus prioridades será vital para que evite la acumulación de trabajo. Mida sus tiempos para que pueda cumplir cada tarea.
- Respirar profundo y tener paciencia: Hay momentos en los que el trabajo se vuelve costoso y puede generar dolores de cabeza. Ante estas situaciones, tome un respiro y tenga la mente clara. Con un poco de paciencia, podrá realizar sus labores con mayor tranquilidad y podrá reducir el flujo de trabajo.
- Los problemas personales no se llevan a la oficina y viceversa: Es indispensable que los problemas personales no se junten con la vida laboral. Evite combinar los problemas del trabajo con los personales y verá que tendrá una cabeza más tranquila para solucionar sus conflictos en el trabajo y ejecutar sus actividades más tranquilamente.
- Hay tiempo para todo: Que el trabajo no le abrume ni le quite espacios. Tómese su tiempo para hacer actividades relajantes y que pueda disfrutar, como leer, hacer yoga o dibujar. Esto podrá distraerlo de los problemas del trabajo y despejar la mente. Además, cumpla con su horario de almuerzo, de entrada y de salida de la oficina.
- Ejercicio relajante: Haga actividades físicas moderadas con regularidad. Una caminata moderada de solo 30 minutos por día puede ayudar a levantarle el ánimo y reducir el estrés.
- ¡Dígale no al cigarrillo y al alcohol!: Es importantísimo que usted no caiga en el consumo de tabaco o de bebidas alcohólicas como métodos para sobrellevar el estrés. Es contraproducente para su salud y puede producirle otras complicaciones físicas.
Es esencial que a partir de los 45 años las personas realicen exámenes regulares para vigilar la salud del corazón. De esta manera, si existe algún problema, será mucho más fácil obtener un tratamiento oportuno.