La gran duda que dejó Rusia 2018: ¿Carece Costa Rica de variabilidad táctica en el campo?

San Petersburgo, Rusia. ¿Le falta a Costa Rica variabilidad táctica? ¿Debería la Selección emplear una nueva idea? ¿Se acabaron los éxitos con la famosa línea de cinco en zaga?... Después de la tempranera eliminación de Rusia 2018, esos cuestionamientos salen a la luz porque la Nacional, luego de 180 minutos en el Mundial, continúa sin anotar.

Desde que Jorge Luis Pinto asumió el pasado proceso a Brasil 2014, Costa Rica implementó un sistema compuesto por cinco hombres en defensiva, cuatro volantes y un solo delantero.

Así jugó en la eliminatoria y también lo hizo en la Copa del Mundo. Normalmente, el colombiano apostó por Joel Campbell como su centro delantero, acompañado por Bryan Ruiz y Christian Bolaños.

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Con la salida de Pinto y la llegada de Paulo César Wanchope, el costarricense de entrada intentó sacar esa idea de la mente de los jugadores y empezó a probar con la línea de cuatro en el fondo, cuatro mediocampistas y dos artilleros; no obstante, defensivamente el cuadro patrio no se veía tan sólido.

Bajo el mando de Chope se recibieron 21 goles en 15 duelos, por lo que se mantuvo como sistema número uno: el 5-4-1.

Ante la repentina salida de Wanchope del banquillo y la llegada de Óscar Ramírez tampoco se dieron variantes.

Óscar más bien se dedicó a afinar cada vez más la línea de cinco, a pulirla y buscar los hombres adecuados para cada rival, pero no cambió la idea de acuerdo a las circunstancias que enfrentó.

No hay duda que la Tricolor llegó a Rusia con su defensiva en buen nivel; sin embargo, cuando se vio contra la pared no pudo responder... Las ganas y los deseos de ir hacia adelante no fueron suficientes para incomodar a Serbia y Brasil. Tampoco se dio una reacción desde el banquillo que provocara una mayor presencia ofensiva.

“En un mundial la riqueza táctica es esencial y Costa Rica no la tuvo. Por ejemplo, en el partido ante Serbia es notorio, el técnico saca a David Guzmán y yo pensé que pasaría con dos delanteros, pero lo que hizo fue retrasar a Bryan Ruiz y mantuvo el mismo sistema. Al final solo se hicieron cambios de posición. Serbia jugó 5-3-2, si Costa Rica no quería perder pudo pasar a línea de cuatro y darle mayor peso al ataque. Los sistemas deben ser más flexibles”, enfatizó el técnico nacional Johnny Chaves, quien estuvo en Rusia siguiendo a la Sele.

Chaves añadió que ante la necesidad no se vio la intención de buscar los goles y explicó en sí la línea de cinco tica no es el problema.

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“Uno puede tener una idea, pero hay que meterle variantes a eso. Hoy en día hay mucha tecnología para estudiar al oponente, por lo que los cambios son muy importantes. El sistema es para partir, pero en el juego la cosa cambia. El juego de Bélgica es muy rico porque ellos utilizan el mismo sistema que Costa Rica, pero para atacar pasa muy bien a un 3-4-3, se dan muchos movimientos en el medio campo de la fase defensiva a la ofensiva”, añadió.

En cuanto a cómo lo ven los futbolistas, Óscar Duarte considera que esta es la forma ideal que Costa Rica debe jugar.

El zaguero del Espanyol de Barcelona recalcó en los resultados que ha entregado la actual idea táctica patria; además aseguró que desde su perspectiva la gran diferencia con lo que se hizo antes es que ahora los goles no han caído, como sucedió en Brasil 2014.

“Yo creo que ha sido lo mismo, han sido ocho años trabajando sobre el mismo sistema. Nos dio lo que nos dio en Brasil, nos trajo a Rusia, al final por otras situaciones las cosas no salieron como queríamos, pero no veo el problema con el sistema...”, dijo.

“En la eliminatoria, faltando tres fechas, Óscar hizo un gran trabajo, faltando tres fechas estábamos clasificados”, agregó Duarte.

Por su parte, Marco Ureña, después del partido ante Brasil, no escondió que la idea representa un gran sacrificio para el hombre que está en punta.

“No es el juego que quisiera hacer, pero es el que me toca. Siempre me toca enfrentar a dos centrales, nunca estoy en ventaja”, analizó.

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De acuerdo a lo que se vio en el campo, el sistema tico parece ser dominado con amplitud por la mayoría de los rivales: en los últimos 12 encuentros, Costa Rica solo obtuvo dos victorias y el rendimiento fue de apenas un 22% gracias a ocho puntos alcanzados de 36 posibles.