Los equipos grandes siempre buscan alcanzar el primer lugar, por lo que cualquier otro resultado no es visto con agrado.
Aunque esta consigna aplica a Alemania, el cuadro teutón debe salir con la frente en alto porque hizo un gran Mundial y porque le dio oportunidad a unos jóvenes que sorprendieron al planeta futbol.
Esta es la tercera vez en la década que los alemanes se ubican entre los tres primeros lugares.
En Corea y Japón 2002 fueron segundos, luego de perder la final dos goles por cero contra Brasil.
Entre tanto, en las dos últimas citas del orbe Alemania se ha tenido que conformar con el tercer puesto. En el Mundial del 2006, disputado en su territorio, le ganó el juego por la medalla de bronce a Portugal, después de ser eliminados por Italia en semifinales.
Pero no todo es negativo para el equipo de Joachin Löw, ya que en Sudáfrica surgieron figuras que dan de que hablar por su buen juego y su personalidad.
Estos jóvenes mostraron que pueden llegar lejos y prometen ser protagonistas en las próximas citas mundialistas.
El volante Bastian Schweinteiger opinó que, a pesar del dolor de no llegar a la final, deben resaltar el trabajo de los nuevos compañeros.
“Tienen carácter y futuro”, dijo el mediocampista de 25 años.
Schweinteiger no le quitó valor al tercer lugar, más bien dijo sentirse orgulloso del equipo.
“Esto es muy importante para nuestros hinchas en Alemania. Gracias a Dios ganamos el partido”, aseveró el bávaro.
De la misma manera se manifestó el joven de 23 años Sami Khedira, quien dijo que “queríamos ganar y jugar bien. Y por eso dimos todo lo mejor hoy (ayer). Tenemos una selección muy joven. Para la mayoría fue el primer Mundial”.
Estos jugadores, más otros jóvenes consagrados como el delantero Lukas Podolski (25) y Schweinsteiger (25), llevaron a Alemania a jugar un gran Mundial.
Incluso, los germanos pasaron de ser un participante más al principal favorito para el título.
Dos goleadas contra grandes selecciones como Inglaterra y Argentina avisaron a los rivales de la capacidad de los teutones.
Serbia en primera ronda y España en semifinales fueron los únicos que supieron controlar a la ofensiva alemana y lograron darle un dardo mortal para vencerlos 1-0.
Alemania mostró tener un buen futbol y sus jugadores ahora serán de los más cotizados por los equipos europeos.