Stéphane Peterhansel gana la segunda etapa en el Rally Dakar

San Rafael, Argentina. AP El legendario Stéphane Peterhansel en autos y el británico Sam Sunderland en motos, con el chileno Francisco López como escolta pese a caerse en un río, fueron los ganadores en sus categorías en la segunda etapa del Rally Dakar Suramérica, que se corrió entre dos ciudades argentinas.

Peterhansel, con un Mini, aventajó a los españoles Carlos Sainz y Nani Roma, quienes le siguieron en ese orden, para convertirse en flamante líder de la clasificación general al desplazar al portugués Carlos Sousa, ganador de la primera etapa y que ahora quedó relegado, ya que no había llegado entre los primeros al promediar la jornada.

Monsieur Dakar, como se le conoce a Peterhansel, fue 11 veces campeón de esta competencia, la última de ellas en 2013. El francés ganó cinco títulos a bordo de autos y seis con motos.

Sunderland, conduciendo una Honda y nuevo ganador histórico de una etapa de esta mítica competencia, aventajó a Chaleco López (KTM) y al español Joan Barreda (Honda), quien fue ganador de la primera etapa y se mantiene como líder en la clasificación general de esta carrera de unos 9.000 kilómetros por tierras de Argentina, Bolivia y Chile.

“Ha sido fantástico pilotear por terrenos tan variopintos en el día de hoy (ayer), con mucha arena, pistas polvorientas, piedras, algunos pasos muy técnicos y lentos y luego tramos rapidísimos”, dijo Sunderland, quien clavó tres horas, 42 minutos y 10 segundos para un recorrido de 359 kilómetros entre las ciudades de San Luis y San Rafael.

López llegó 39 segundos después y Barreda a dos minutos, aunque de todos modos es el líder en la clasificación general.

“Fue una etapa bien extraña. Se me hizo entretenida pero me caí en un río y se mojó mi moto, eso me hizo perder tiempo”, dijo el chileno López, quien quedó segundo.

La tercera etapa se correrá el martes entre San Rafael y San Juan, sobre unos 300 kilómetros de competencia, metros más o menos dependiendo de las categorías.

Será una etapa “maratón”, en la que los pilotos no recibirán asistencia alguna, salvo sanitaria, por lo que los problemas mecánicos o de otro tipo deberán resolverlos.