Lo que era un debut de maravilla en estos play-off para el zurdo Clayton Kershaw –picher del momento en Grandes Ligas– y los Dodgers, se convirtió en una pesadilla en una sétima entrada en la que los Cardenales anotaron ocho carreras y se fueron arriba para el triunfo, por un cerrado 10-9, en Los Ángeles.
Kershaw permitió un jonrón del segundo bateador que enfrentó, Randal Grichuk, antes de empezar a dominar el partido. Fueron 14 maderos seguidos los que retiró; 10 ponches los que repartió.
Entre tanto, los locales anotaron seis carreras que auguraban la victoria. Dos impulsadas de Hanley Ramírez y Carl Crawford, en la tercera; dos más de Yasiel Puig y Matt Kemp, en la cuarta, y un bambinazo de dos rayas de A. J. Ellis, en la quinta, hacían imposible pensar en un desenlace triste para el local.
Es más, pocos prestaron atención al jonrón solitario de Matt Carpenter, para descontar en la sexta.
Pero llegó esa mágica sétima entrada que se fue alargando a punta de sencillos. Matt Adams impulsó una con las bases llenas, lo mismo que Jon Jay. Escenario abierto para que Carpenter, con un gran doblete, impulsara tres más y acabara la noche del as de los Dodgers.
Kershaw terminó con ocho carreras limpias en su cuenta, su máximo de todo el año y la misma cantidad, combinada, que permitió en sus cinco salidas de setiembre.
No acabó ahí. Holliday consolidó la ventaja con un vuelacercas que marcó tres rayitas más.
Los Dodgers respondieron en la octava con jonrón de dos carreras del titán Adrián González.
En la novena, Dee Gordon impulsó una más para colocar a Puig en el terreno donde nacen las leyendas: con hombre en tercera (la carrera del empate) y dos outs en la pizarra. Mas el cerrador de los Cards, Trevor Rosenthal, con un ponche gigantesco, sentó al cubano: 10-9.
En la otra serie divisional del Viejo Circuito, los Gigantes iniciaron con pie derecho su enfrentamiento con los Nacionales, al ganar por 3-2 en Washington.
Jake Peavy tuvo, a sus 33 años, su primera salida de calidad en postemporada, al no permitir hits en las primeras cinco entradas y entregar el partido con ventaja.
Buster Posey, Joe Panik y Brandon Belt impulsaron las carreras de San Francisco, que ayer acumuló nueve partidos de play-off ganados de forma consecutiva.
Orioles imparables. El bullpen le volvió a fallar catastróficamente a Detroit y los Tigres vieron escaparse una ventaja de tres carreras, en la octava, para el segundo triunfo de los Orioles en la serie.
Justin Verlander le entregó el partido ganado a Aníbal Sánchez, quien pasó a ser relevista para intentar tapar los huecos de un bullpen lamentable y mantuvo la ventaja por dos entradas. Pero Joba Chamberlain dejó escapar el juego al cargar con tres de las cuatro carreras limpias del octavo episodio.
Delmon Young ingresó como bateador emergente para conectar el doblete que impulsó las tres carreras de la remontada.