El Saprissa experimentó una jornada triunfal durante su visita al Puntarenas F.C., que se asemejó a un día de playa en la encantadora Perla del Pacífico. Con una actitud relajada y sin presiones, los morados dominaron la cancha de manera magistral, dejando una sonrisa de oreja a oreja en sus rostros al borrar por completo a su adversario y vencerlo con un marcador final de 4 a 2.
El delantero jamaiquino Javon East encontró en el entorno pacífico una comodidad singular. Desempeñando un papel sobresaliente, East se destacó tanto en el ataque como en la defensa, pero especialmente al anotar tres veces, convirtiéndose en la figura indiscutible del partido.
East se encuentra en una forma excepcional en el Monstruo, desarticulando líneas defensivas con sus movimientos diagonales y abriendo espacios para sus compañeros al atraer las marcas contrarias.
El acierto de Vladimir Quesada al alinear a Javon junto a Ariel Rodríguez desde el inicio también fue clave. Ambos delanteros número “9″ se complementaron perfectamente, generando movimientos estratégicos que liberaron a uno u otro para enfrentar la portería rival.
Ariel Rodríguez, además, alcanzó un hito personal al marcar su gol número 100 en competiciones oficiales con la camiseta del Saprissa. El goleador tenía este logro en su mente; incluso una camiseta con el número 100 estaba preparada en el banquillo para conmemorar el momento, un festejo que causó controversia entre los estadígrafos del fútbol nacional, a quienes nos les cierran las cuentas. “Que se pongan vivos...” dijo Ariel en broma, en declaraciones a Tigo Sport.
El Saprissa también se benefició de un equipo porteño que careció de vigor en la mayor parte del juego. Aunque los naranjas reaccionaron en los últimos 15 minutos y descontaron para maquillar el marcador, el Monstruo jugó a sus anchas en el estadio de Puntarenas.
El debut de Diego Vásquez como entrenador de Puntarenas mostró un equipo en problemas en la zaga y con un ritmo menos frenético que en sus actuaciones previas en el Lito Pérez. Aunque el Puntarenas suele ser un adversario difícil, en este partido brindaron todas las facilidades al Saprissa.
Los morados se encontraron tan cómodos en el terreno porteño que la relajación al final del encuentro provocó que cedieran espacios en defensa, aprovechados por los locales para descontar de un 4 a 0 a un 4 a 2.
A pesar de esto, Saprissa tuvo oportunidades para ampliar su ventaja, con al menos tres ocasiones claras de gol, dos de Michael Chirinos y una de Orlando Sinclair.
La inquietud generada por esta relajación llevó a Vladimir Quesada a tomar medidas, levantándose del banquillo para instar a sus jugadores a salir de su zona de confort y reforzando la defensa con la inclusión de Gerald Taylor y Kliver Gómez.
Al cierre del partido, Puntarenas luchó valientemente por conseguir un tercer gol que hubiera generado nerviosismo en el Saprissa, pero no lograron definir sus oportunidades de manera efectiva.
La entrada de Gerald Taylor como mediocampista defensivo le brindó al Saprissa el control en el centro del campo, evitando complicaciones innecesarias.
El Monstruo recupera su lugar en la parte alta de la tabla, llegando a nueve puntos y empatando en la segunda posición con el Herediano, mientras sigue de cerca al Cartaginés (a solo un punto de distancia).
En este partido en Puntarenas, el Saprissa disfrutó de una actuación sin contratiempos, mostrando gran comodidad en el terreno de juego, superando a su oponente con facilidad y bailando al son de su propia victoria. Fue una visita que, a pesar de las expectativas previas, resultó tan relajante y exitosa como un día de esparcimiento en las playas del Paseo de los Turistas.