Puntarenas F.C. y Cartaginés sacaron chispas sobre la gramilla del Miguel Lito Pérez. Los naranjas y blanquiazules chocaron con ganas, metieron pie como si su duelo fuera una final y también anotaron goles; corrieron los balones con orgullo y entregaron un buen espectáculo, en ocasiones más agresivo que técnico.
Los puntarenenses fieles a su estilo salieron desde el primer minuto con el acelerador hasta el fondo. Los dirigidos por Alexander Vargas iniciaron ganando línea de fondo, sumando hasta siete hombres en el área contraria y con el apoyo de su afición hacían pensar que en cualquier ocasión se podía dar la anotación.
Los porteños tienen dos armas que son vitales en su engranaje: Kliver Gómez y Krisler Villalobos. Los dos jugadores se comen sus bandas, saben volver con dinámica a posición defensiva, pero sobre todo son dos futbolistas que tienen claro que un carrilero debe cuidar su zona defensiva y también ser dos atacantes más. Ellos llegan a la última línea y sacan de puerta, generando centros que cualquier centrodelantero se desearía; lo mejor es que lo realizan durante los 90 minutos.
De Puntarenas también se destaca el trabajo de destrucción del juego rival, pero igual de creación para su equipo de Johnny Gordon y Yoserth Hernández. Los dos saben recuperar, luego armar y encontrar los espacios para desahogar la pelota y así salir del caos que se viven el centro del campo.
¡Cómo hacía falta el PFC en Primera División!, porque su alegría, el ambiente de la Olla Mágica emociona a cualquiera.
De Cartaginés se destaca el esfuerzo físico que hizo.
Los brumosos tuvieron problemas para regresar de Honduras, donde jugaron entre semana por la Liga Concacaf y solo pudieron entrenar con grupo completo una vez previo al cotejo; pero aún así los cartagineses no se entregaron y con una disciplina táctica muy similar a la que mostraron cuando ganaron el campeonato anterior consiguieron ponerse arriba, defender su gol y robarle un punto al cuadro más sólido del actual torneo.
La experiencia de Michael Barrantes fue determinante para que los dirigidos por Géiner Segura tuvieran la pelota en momentos clave del encuentro, también la llegada de Marco Ureña al club dio una variante ofensiva que pone al campeón con otra opción y no solo depender de Marcel Hernández.
El mundialista de Brasil 2014 y Rusia 2018 está en buena forma física, por otra parte tiene esa potencia y velocidad que siempre le ha permitido sobresalir por encima de los demás; y así fue como logró conseguir un penal para los monarcas, el cual fue transformado por Michael Barrantes.
Otro hombre que le ha caído de perlas a los azules es Kevin Espinoza. El excentral de Saprissa se ve con aplomo en la zaga brumosa y llegó a ser un candado para una zona que se mostraba frágil en el inicio del campeonato.
Puntarenas no pudo sumar otra victoria consecutiva, los porteños siguen líderes de su zona, pero ya el campeón les demostró que se puede ir al Lito Pérez y con mucha garra y buena estrategia se les puede hacer daño. Cartaginés sigue sin despertar en la tabla, porque el campeón tico continúa lejos de puestos de clasificación, empero en el desempeño hay buenas señales que demuestran que el plantel poco a poco va volviendo a ser el que alzó el trofeo.
Los goles fueron de penal, uno de Barrantes (40’) y otro de Asdrúbal Gibbons (65’), pero el cotejo tuvo de todo.