Cartago. La última vez que Herediano y Cartaginés se vieron las caras fue en la final del torneo de Verano en el estadio Eladio Rosabal Cordero.
Para hoy, el escenario, los equipos y hasta los técnicos serán los mismos, pero las circunstancias serán muy diferentes.
Por aquellos días, los brumosos estaban en su apogeo y los florenses tenían que remontar una desventaja de dos goles.
La historia ya es de sobra conocida: los rojiamarillos ganaron el título y los blanquiazules quedaron lejos de un cetro que se les niega hace 73 años.
Esta noche, el Club Sport Herediano de Marvin Solano viene con un rendimiento arrollador y goleando a sus rivales; si gana, subirá al primer lugar.
En contraste, los dirigidos por Javier Delgado han tenido un torneo irregular, con seis empates (cinco de ellos en casa), en el cuarto lugar de la tabla, pero seguidos muy de cerca por varios rivales.
Para acrecentar la problemática brumosa, el equipo tiene siete lesionados, a los que se suman las ausencias de Carlos Johnson y Randall Brenes por su convocatoria a la Selección.
“El presente no es el mejor momento de nuestro equipo, pero confío en que los muchachos que están reediten el rendimiento de la serie final y saquen un buen marcador, los equipos grandes son grandes ante estas circunstancias”, resaltó el gerente deportivo y exfutbolista brumoso, Claudio Ciccia.
Bajas. Exceptuando la portería, el equipo de Delgado, presenta ausencias de titulares en todos los departamentos, aunque es la delantera donde más las adolece.
El brasileño Neto está lesionado desde hace varios meses y Andrés Lezcano se recupera de una operación. Como delanteros natos solo están disponibles Erick Scott, Rodrigo Garita y Giovanni Clunye.
Delgado tendrá que recurrir a ellos o improvisar con volantes como Pablo Herrera, Paolo Jiménez, o Eduardo Valverde,
En ese ajedrez está el timonel brumoso, cuyo último ensayo lo realizó ayer, en el estadio Labrador, de San Isidro de Coronado, una cancha artificial como la que encontrará hoy, en el Rosabal Cordero.