Apenas tiene 20 años y hasta ahora no había jugado con Saprissa en Primera División, donde ha ganado la confianza de sus compañeros. Kendall Waston lo compara con Francisco Calvo.
De perfil zurdo, trata de no complicarse al jugar con la pelota; con ella en los pies, busca servir al compañero inmediato y en la marca, por lo general, trata de anticipar al rival y cortar de inmediato.
Douglas Sequeira ha ganado regularidad; ha jugado en seis de los 9 partidos disputados por Saprissa y suma un total de 477 minutos de los 810 que han disputado los tibaseños en el torneo.
“Douglas es un gran jugador, tiene esas características que, a mi gusto, son similares a las de Francisco Calvo, a quien le gustan esos balones filtrados. Con el pasar de los partidos, porque ya tuvo experiencia al irse a préstamo al Santos de Guápiles, va a ir sumando y creciendo. Es un jugador muy bueno que nos ayuda bastante”, dijo Kendall en Teletica radio sobre el joven.
Antes de iniciar el campeonato, su destino estaba en el Santos de Guápiles, pero Vladimir Quesada, técnico de Saprissa, pensó diferente y lo trajo de vuelta, ya que el torneo pasado jugó a préstamo con los guapileños.
Fuera del terreno de juego, Douglas es un muchacho tranquilo, muy serio, de perfil bajo, y con madurez ha sabido llevar el apellido Sequeira. Algunos cuestionan que ser hijo de Douglas Sequeira le abrió el camino para jugar en la máxima categoría.
Para algunos aficionados de Saprissa, Douglas tiene futuro; a otros no les agrada. Es cierto, en algunas acciones quizá no ha tomado las mejores decisiones y por eso desde las gradas se han escuchado algunos silbidos.
“Que le hayan silbado, no pasa nada; recuerdo que hasta a Paté (Wálter Centeno), a Alonso Solís, a la Bala (Rónald Gómez), les silbaban también, y con méritos propios esos silbidos se transformaron en aplausos. Más bien, estas cosas sirven para trabajar más y formar el carácter y demostrarse a él mismo, no callar bocas, sino demostrarse a él mismo el jugador que es”, opinó Waston.
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Douglas Sequeira ha participado en 6 de los 9 juegos que Saprissa ha disputado en el campeonato. Aquí marcó a Jurguens Montenegro en el duelo ante Pérez Zeledón. (Prensa Pérez Zeledón).
Para Kendall, figuras como Douglas, Fabricio Alemán, o cualquier otro hijo de algún exjugador, siempre van a estar bajo la lupa de los aficionados, quienes incluso los llegan a comparar con el rendimiento o la carrera de sus padres.
“Que sean hijos de exjugadores, desgraciadamente o dichosamente, pone un peso sobre ellos, porque mucha gente de una vez los compara con el papá. Es la realidad y es el peso que deben llevar toda la vida. Los hijos nuestros, si llegan a ser futbolistas, van a cargar con ese peso y está en ellos marcar su propia historia. Es algo que cada uno debe ver cómo lo maneja de manera positiva para que esas comparaciones no le lleguen a afectar”, opinó Kendall Waston.
Hace mes y medio, Douglas Sequeira le comentó a La Nación que desde los 10 años ha lidiado con los comentarios de quienes mencionan que las oportunidades recibidas en el fútbol se deben a ser hijo de Douglas.
“Yo trato de hacer mi carrera por lo que hago en el campo y no porque la gente diga que soy el hijo de Douglas Sequeira. Yo he llegado donde estoy por mí, mi papá no me ha ayudado ni metido mano a mi favor”, destacó el joven Douglas Sequeira.
El tiempo se encargará de marcar el futuro de Douglas, determinar si continúa creciendo como futbolista y se consolida; de momento avanza poco a poco. A algunos aficionados les gusta su juego, a otros no tanto, pero depende de él forjar su propia historia, como mencionó Kendall Waston.