Por mucho que se prepare hasta el mínimo detalle, hay aspectos que ni el mejor entrenador puede prever en el fútbol y tanto Géiner Segura como Hernán Medford lo sufrieron en la semifinal entre Cartaginés y Herediano. Las rojas cambiaron todo el libreto de un lado y otro, pero al final fueron los brumosos los que ajustaron para dejarse la serie y el boleto a la final de la segunda fase del Torneo de Clausura 2022.
Si la expulsión de José Gabriel Vargas en el minuto 39 fue un golpe bajo para los blanquiazules, cuando ya estaba abajo en el marcador, 1 a 0, la roja de Kennedy Rocha en el 74′ fue lapidaria para los florenses, justo cuando el choque ya estaba 1 a 1 (2 a 1 en el global para Cartaginés).
Vargas había sido el héroe apenas el domingo anterior, tanto por su gran trabajo en defensa, como por el gol que consiguió en el Fello Meza. Sin embargo, tan solo dos días después se convirtió en villano. El central no hacía un mal partido en la vuelta en el Nacional, es más, era el líder de la zaga y se imponía en la mayoría de los duelos, pero cometió un grave error.
Solo el defensor sabrá qué pasó por su cabeza, qué lo llevó a agredir, quizás involuntariamente, a Yendrick Ruiz. Lo claro es que la falta ameritaba expulsión y dejó a sus compañeros con uno menos, tras buscar una pelota en las alturas y estirar su antebrazo al punto de impactar de lleno al delantero florense.
Pineda de entrada le mostró la amarilla, pero la sangre brotando de la boca de Ruiz y la conversación con el asistente Leslie Macre hicieron que rectificara y cambiara el color de la tarjeta.
José Gabriel duró casi cinco minutos en salir de la cancha y pese a que en un momento iba directo a los vestidores, tras un breve intercambio de palabras con el asistente Mauricio Wright, volvió al campo, no para reclamar al árbitro, sino para increpar a los rojiamarillos, en particular a Orlando Galo. No es posible confirmarlo, pero pareció que la orden fue provocar en busca de una roja de los adversarios.
Más allá de esto, el técnico Segura reacomodó sus fichas, en el complemento tan siquiera pasó apuros y hasta convirtió por intermedio de Jeikel Venegas para meterse con vida. Ronaldo Araya dejó el campo en sustitución por Mauricio Montero, movimiento pensado para bajar a Daniel Chacón al centro de la defensa y con esto seguir peleando hasta llegar al empate.
“Tuvimos una expulsión que nos puso en aprietos, pero supimos manejar el partido, el profesor hizo la variante que ocupaba y supimos cambiar el sistema. Sabíamos que en cualquier momento podíamos encontrar el gol y así fue, pero aún con 10 hombres la serie iba a ser cerrada. Todos hicimos un gran esfuerzo por el compañero que quedó fuera y sacamos la serie”, comentó Kevin Briceño.
Es más, Montero hasta podría decirse que logró su objetivo lejos de lo táctico, porque provocó a Rocha, quien en un saque de banda le lanzó un cabezazo al contención y el réferi de inmediato le mostró la roja.
Si Medford pretendía hacer pesar su ventaja, nunca lo logró y la acción de Kennedy no hizo más que llenar de fuerza a los visitantes para amarrar el resultado que más le convenía.
“El tener un hombre de más implica tener cuidado. Hablamos de que no teníamos que desesperarnos, que teníamos que tener paciencia, pero no fuimos para adelante y tuvimos más paciencia de la que requeríamos. Se nos fue de las manos, pero no le bajamos la cabeza a nadie y estoy seguro que nos vamos a levantar”, dijo Yeltsin Tejeda.