El fútbol costarricense tiene a un arquitecto que llama la atención en la cancha por su entrega, buena marca, ubicación y que además disfruta cada momento en los terrenos de juego.
Este joven, quien se graduó en arquitectura y urbanismo y también posee una maestría en diseño urbano, demuestra que el fútbol y los estudios pueden ir de la mano.
Apenas rozaba los 18 años y jugaba en segunda división en el país, cuando el fútbol le abrió las puertas que le cambió la vida. Tuvo la oportunidad de hacer carrera en Estados Unidos, donde llegó a jugar en la MLS y de paso estudió y se graduó como profesional.
Hace tres años regresó porque tenía una cuenta pendiente y hoy Dennis Castillo, quien a fin de mes cumple 30 años, destaca en la zaga de Sporting.
“Volví porque en el segundo año en Colorado Rapids me querían prestar y sentía que podía jugar en primera división. No me pareció ir a préstamo y me dieron la libertad. Tenía la idea de seguir afuera, pero también uno de mis sueños era jugar en Primera en Costa Rica, quería demostrarlo.
”Tenía opción de una prueba en Noruega, un contrato en Finlandia, pero no me sentía al ciento por ciento comprometido y en eso Pérez Zeledón venía de ser campeón, me ofrecieron contrato y sentí que podía crecer y mejorar, era Primera y en Costa Rica podía estar cerca de la familia y además Pérez iba a jugar en Concacaf”, aseguró Dennis Castillo.
El zaguero estuvo siete años en Estados Unidos, inició en el fútbol universitario, pasó por la segunda y en el 2016 empezó como profesional en la MLS, donde fue colocado en el draft y elegido por el equipo de Colorados Rapids.
“Fueron experiencias muy bonitas, también fue muy duro porque debía competir ante jugadores de muchos países y de mucha calidad. Los cupos internacionales en los equipos de la MLS son muy bien valorados, llega gente de mucho peso y que me dieran el chance de tener un contrato, firmarme y darme continuidad es de mucho agradecimiento de mi parte”, afirmó el futbolista de Sporting.
Dennis se marchó de Costa Rica porque le ofrecieron una beca en una universidad y con mucha ilusión comenzó a hacer realidad dos de sus anhelos, jugar y estudiar, se inclinó por arquitectura porque su padre, quien también se llama Dennis Castillo, se lo inculcó sin haberlo planeado.
“Mi papá es ingeniero civil y de niño cuando me llevaba a entrenar, también estaba con él en el trabajo y al momento de hacer inspecciones, planos o valoraciones de diferentes construcciones, yo estaba ahí viendo y le preguntaba. A mí me llamaba la atención el diseño, pero estudiar arquitectura fue influencia de mi papá. Elegí bien porque me gusta, me llena mucho y es muy demandante”, dijo Dennis.
De momento Castillo no ejerce su carrera, está metido de lleno con Sporting en la lucha por clasificar a semifinales; en la cancha se entrega al máximo por el cuadro aurinegro, pero tiene claro que en el futuro, cuando cuelgue los botines, ahí comenzará una nueva aventura entre planos, diseños, crear conceptos y todo lo que involucra la arquitectura.
“La prioridad es el fútbol, en mis tiempos libres me sigo certificando, pero para ser profesional en fútbol hay que dedicarle bastante tiempo. En el futuro cuando ya no siga en este deporte me meto en la arquitectura, me gusta mucho, es una carrera bastante exigente”.
Aparte de ser un buen defensa, a Castillo le gusta sumarse al ataque en las acciones de táctica fija, va bien en el juego aéreo y en este torneo suma dos anotaciones.
“Siempre me ha gustado en la táctica fija sumarme al ataque para cabecear a ver qué puedo pellizcar ahí de rebotes, o balón parado directo”.
Castillo es regular en las formaciones del técnico José Giacone, pero al inicio del campeonato una lesión lo alejó por dos meses y medio de los terrenos de juego.
“He tenido regularidad en la medida que he estado disponible para jugar, tuve una lesión un poco larga, estuve sin actividad como dos meses y medio, pero estoy contento con mi rendimiento. Estoy muy feliz de haber regresado, de recuperarme y no sentir más dolencia de la fractura y especialmente en estas instancias que son partidos decisivos para buscar la clasificación”, expresó el joven.
Dennis tuvo una fractura en el tobillo izquierdo, sufrió un golpe durante un entrenamiento, pero siguió en las prácticas porque no era un dolor intenso, hasta que en la cuarta fecha del campeonato, en el juego contra la Liga, hizo un pase y el dolor fue insoportable.
“En los estudios salió que tenía una fractura por avulsión, quiere decir que se desprendió una parte del hueso adherido al ligamento y sufrí la fractura y estuve dos meses y medio fuera”.
El trago amargo al inicio del torneo quedó atrás, Dennis tuvo paciencia, el respaldo del club, sus compañeros y cuerpo técnico, volvió con nuevos bríos y como todos en Sporting, se ilusiona al ver que tienen la posibilidad de clasificar a las semifinales.
¡Le tiene la medida puesta! Nadie marcó a Dennis Castillo y lo pagó caro #Cartaginés pic.twitter.com/60KeDn3nsT
— Tigo Sports Costa Rica (@tigosports_cr) September 21, 2022