La agencia federal del automóvil (KBA) de Alemania puso en marcha el programa de retirada de 630.000 vehículos en ese país, una gestión voluntaria de la industria alemana, en apuros a causa del escándalo de los motores diésel.
La agencia federal del automóvil (KBA) de Alemania puso en marcha el programa de retirada de 630.000 vehículos en ese país, una gestión voluntaria de la industria alemana, en apuros a causa del escándalo de los motores diésel.