El colegio privado accedió a acompañar y orientar a la niña con su comportamiento animal, siempre y cuando este último no se convirtiese en un motivo de distracción para sus compañeros.
El colegio privado accedió a acompañar y orientar a la niña con su comportamiento animal, siempre y cuando este último no se convirtiese en un motivo de distracción para sus compañeros.