Los beneficios de vender a grupos de graduandos la “serenata completa ya armada” los conoce bien Manuel, quien accedió a contar su experiencia si se reservaba su identidad, pues hace más de un lustro dejó este negocio.
La esperadísima serenata es, sin duda, la más añorada de las fiestas de último año de secundaria, una suerte de ritual que los estudiantes preparan por cuenta propia y en la cual los colegios no tienen participación ni responsabilidad alguna.
Los tríos son muy fieles a su estilo. El bolero, el tango y las baladas románticas son su esencia; sin embargo, la evolución se impuso y, en algunas ocasiones, tienen que cambiar el repertorio para complacer a sus clientes y mantenerse activos.