Más felicitaciones que preguntas hicieron ayer los lectores de La Nación a Carlos Arredondo, el tico que ayudó a varios heridos tras los atentados de Boston, Estados Unidos, el 15 de abril.
Arredondo participó, ayer, en un videochat en vivo, donde los cibernautas de La Nación le hicieron preguntas y comentarios sobre su vivencia en esa ciudad estadounidense, donde vive desde hace más de 30 años.
Frases como “sos un ejemplo a seguir” y “son ese tipo de gestos los que debemos repetir en Costa Rica”, fueron algunos de los halagos recibidos en el videochat.
Al costarricense, a quien denominaron como “héroe” tras ayudar a varios heridos por las explosiones, también le preguntaron detalles de cómo lo sucedido ha marcado su vida y qué lo llevó a estar ese día en el lugar indicado para ayudar tanta gente.
No faltaron consultas sobre la escena que estuvo en muchas portadas de periódicos en el mundo, en donde se le observa con un joven que perdió sus piernas.
Arredondo comentó que aún sigue en contacto con el muchacho.
“Jeff tiene 27 años, es de Massachusetts, trabaja medio tiempo, se encuentra estable, perdió sus dos piernas, sufrió quemaduras de segundo y tercer grados, y parte de los metales que explotaron le penetraron en su cuerpo, abriendo su muslo derecho. Me he reunido con él 4 veces. Está estable, se siente muy seguro de sí mismo y tiene el apoyo de la familia a la par”.
El tico compartió una de las experiencias más dolorosas de su vida: además de Alexander, el hijo que perdió en la guerra en Irak, su otro hijo varón, Brian, se suicidó al no soportar la muerte de su hermano.
Años de torero. Arredondo relató que su experiencia como torero improvisado le sirvió en el momento de reaccionar, pues la adrenalina en el cuerpo fue la que le dio esa orden de que había que correr hacia la gente que necesitaba ayudada.
“La experiencia de ser bombero voluntario en Costa Rica me ayudó a actuar. También soy un voluntario de la Cruz Roja americana, y esas reacciones son normales”, relató el costarricense.
Arredondo estará hasta el domingo en el país, pues fue invitado con todo pago por la empresa estadounidense, Caravan Tours.
Ayer, él y su madre Luz se reunieron con la presidenta de la República, Laura Chinchilla. Colaboró la periodista Patricia Recio