Luego de un particular intercambio de discursos entre un diputado liberacionista y una oficialista, los diputados aprobaron, este jueves, el Tercer Presupuesto Extraordinario de la República para este 2019.
La polémica iniciativa legal tuvo un paso algo atropellado por la Comisión de Asuntos Hacendarios del Congreso, donde se había hecho una reforma que ponía en peligro 40 plazas para los Centros de Educación y Nutrición y Centros Infantiles de Nutrición y Atención Integral (CEN-Cinai).
Sin embargo, luego de gestiones del Ministerio de Hacienda, los legisladores aceptaron que, por una única vez, se autorizaran las plazas para esos centros y, además, la plaza que también solicitaba Hacienda para la gerencia de la unidad ejecutora de la Terminal de Contenedores de Moín, por parte del Consejo Nacional de Concesiones.
En lo que no hubo flexibilidad fue en la creación de cinco puestos para el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa).
Originalmente, diputados de Liberación Nacional, la Unidad Social Cristiana, Restauración Nacional, el Partido Republicano Social Cristiano y el bloque independiente fabricista habían bloqueado las plazas.
No obstante, la versión final fue aprobada, en el plenario de la Asamblea Legislativa, de forma unánime, con el apoyo de los 43 parlamentarios que estaban presentes en el salón a la hora de la votación.
Específicamente, las plazas se reparten así:
-36 técnicos de Servicio Civil 3 para apoyo a los CEN-Cinai en sus labores de contratación
-1 técnico de Servicio Civil para fortalecer el proceso de gestión de salarios
-2 profesionales de Auditoría
-1 profesional en Archivística
Los congresistas aprueban esta tercera modificación al Presupuesto Nacional 2019, mientras en la Comisión de Hacendarios se termina de tramitar el cuarto extraordinario. Según Gustavo Viales, del PLN, ya está en camino una quinta modificación.
El pulso que atrasó la votación del primer debate tuvo como protagonistas, precisamente, a Viales y a Laura Guido, del Partido Acción Ciudadana (PAC), quienes por un buen rato se lanzaron acusaciones y buscaron hacer sus propias aclaraciones en relación con ese presupuesto.
Por una parte, Viales acusa al Gobierno y a Hacienda de intentar quitarle dinero a los CEN-Cinai, por una reducción de ¢1.048 millones a lo asignado en noviembre, mientras que Guido defendió que esos recursos no se requerían, porque ya le habían llegado a esa Dirección por la vía del Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Fodesaf).
Además, el verdiblanco sostuvo los reclamos en torno a las plazas de los CEN-Cinai, porque dice que Hacienda no hizo las explicaciones respectivas sobre esas necesidades en su momento.
En la modificación presupuestaria que permite dichas plazas, también se avalan nuevos puestos en las instituciones que los puedan crear con recursos propios.
Otros cambios al Presupuesto
El presupuesto extraordinario incorpora ¢24.000 millones en ingresos de donaciones extranjeras y recursos provenientes de préstamos que pagó el Banco de Costa Rica por el cierre de Bancrédito.
Además, autoriza movimientos entre partidas presupuestarias en varias entidades, hasta por ¢51.500 millones. Entre esas modificaciones, hay un sinnúmero de ajustes en las partidas municipales, donde se autoriza cambios en los destinos originalmente establecidos.
En el presupuesto se destinan fondos para varios proyectos viales, entre ellos el fideicomiso de la carretera San José-San Ramón, conservación vial, el puente sobre el río Virilla, la ampliación de la ruta 147 (en Lindora), el puente General Viejo y puentes entre Escazú y Ciudad Colón.