Atento y sonriente se le vio este 19 de marzo en el Parque Nacional al exministro de Seguridad Juan José Echeverría Brealey, mientras escuchaba al mandatario electo anunciando el nuevo Gabinete.
Fue esta su última aparición pública al lado de sus compañeros del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), agrupación que con el nombre de Coalición Unidad, lo llevó a ocupar el cargo de ministro de Seguridad Pública entre 1978 y 1980, durante el mandato de Rodrigo Carazo Odio. Asimismo, en las recientes elecciones, el partido lo nombró como fiscal ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Diputado entre 1974 y 1978, la figura de Echeverría empezó a destacar cuando fungió como líder universitario y posterior integrante del Movimiento Costa Rica Libre.
Sus aspiraciones políticas lo llevaron a separarse del Partido Liberación Nacional (PLN) y en 1970 fundó junto con Carazo el Partido Renovación Democrática (PRD), que luego se fusionaría con otras agrupaciones en la Coalición Unidad.
De armas tomar
La labor de Johnny -como se le conoce a Echeverría- en el gobierno de Carazo le marcó su trayectoria pública. Quizá en 1978 se convirtió en el primer "superministro" del país, al encargársele la tarea de fusionar dos carteras y crear un despacho llamado fugazmente Ministerio del Interior (Seguridad y Gobernación.)
Eran tiempos de guerra en Nicaragua y en la frontera norte de nuestro país se vivió intensamente la lucha de los sandinistas contra Anastasio Somoza. El Ministro tuvo entonces un papel protagónico.
En ese tiempo se le denunció e investigó por supuesta tenencia de armas prohibidas, pero, tras un juicio penal, fue sobreseído en abril de 1981.
También debió enfrentar al Congreso cuando el liberacionista Armando Arauz, entonces legislador, solicitó un voto de censura en su contra por la presunta desobediencia a la Constitución Política. El ingreso irregular a territorio nacional de dos helicópteros artillados y de 35 miembros de la Fuerza Aérea de Estados Unidos provocó el escándalo. No obstante, la solicitud de Arauz no caló hondo en la Asamblea y fue rechazada por 25 votos contra 19, el 19 de julio de 1979.
Empero, el 8 de octubre de 1981, los mismos legisladores aprobaron un voto de censura contra el presidente Carazo, el ya exministro Echeverría Brealey y otros funcionarios de la época, por un caso relacionado con armas.
Almas de cubanos
Mediante un masivo "puente aéreo" encabezado por Echeverría, durante su gestión como ministro, salieron de Cuba en 1980 más de 3.000 refugiados hacia Costa Rica. El ingreso de cubanos generó un escándalo político y provocó nuevamente la intervención de los diputados.
Conocida como la investigación del "tráfico de almas" en ella fueron cuestionados una serie de funcionarios del Ministerio del Interior al mando de Echeverría. Finalmente dejó su cargo el 22 de mayo de 1980. Ahí finalizó su carrera pública pues, hasta la fecha, no ha sido nombrado nuevamente en gobiernos socialcristianos.
Su huella también incluye la participación como mediador en varios secuestros internacionales. Precisamente, en abril de 1986, el exfuncionario medió en el plagio de la joven colombiana Camila Michelsen, hija de un acaudalado financista de esa nación. Pero ya en 1983 Echeverría había gestionado la liberación de dos ingenieros alemanes capturados por guerrilleros colombianos. Algunas de las negociaciones las realizó a través de anuncios impresos en diarios nacionales.
Hoy, Echeverría está en prisión por un asunto con el que tiene familiaridad y que nunca ha ocultado: la gestión para otorgar visas a cubanos. En noviembre de 1993, fue la última vez que habló acerca del tema, cuando se inició una indagación oficial sobre el incremento en el ingreso de cubanos al país. Incluso reconoció que gozaba del privilegio de estar inscrito como notario en la isla.
"No soy una institución de beneficencia", dijo en esa oportunidad a La Nación, cuando se le consultó sobre el cobro de entre $1.000 y $4.000 que aceptó efectuar por sus gestiones.