¿Considera que el plan de Merkel y Hollande podría contribuir a lograr la paz en Ucrania?
Este es el último intento ante un conflicto que desde enero viene presentando una escalada importante y en el cual los separatistas están logrando cierto avance en la región este, gracias al apoyo de Rusia. Creo que el esfuerzo que están haciendo Merkel y Hollande está procurando resolver por lo menos un alto el fuego en una zona en la cual hay civiles atrapados entre ambos bandos.
¿Cree que ese alto el fuego realmente podría cumplirse?
Lo primero es lograrlo. Creo que aquí el gran tema es que a Moscú le sale más barato un acuerdo con Alemania y Francia que con Estados Unidos. Además, esta es una manera con la que Rusia no solo está llamando la atención, sino también intimidando a las exrepúblicas soviéticas. En el fondo, soy optimista de que se logre no solo el alto el fuego, sino también un proceso de negociación en el cual también Kiev va a tener que ceder ante las pretensiones los separatistas.
¿Rusia podría estar lista para una solución pacífica?
Creo que Rusia está interesada en continuar en el conflicto, pero tampoco va a sacrificar la estabilidad de su economía en momentos en que el precio del petróleo ha caído sustancialmente en el mercado internacional.
¿Suavizaría un acuerdo la postura de Estados Unidos de entregar armas a Ucrania?
Totalmente. Más bien creo que el esfuerzo relámpago que están haciendo Merkel y Hollande es precisamente tendiente a no caer en el envío de armas y más buscar un esfuerzo diplomático de alto nivel.