Río de Janeiro. El presidente brasileño, el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, instó telefónicamente este sábado a su homólogo de Venezuela, Nicolás Maduro, a no tomar “medidas unilaterales” que intensificarían la disputa fronteriza que mantiene con la vecina Guyana, informó su oficina.
“Lula enfatizó la importancia de evitar medidas unilaterales que podrían agravar la situación” en la disputada región de El Esequibo, un área sumamente rica en petróleo, indicó la Presidencia brasileña en un comunicado, añadiendo que el mandatario había expresado la “creciente preocupación” de los países sudamericanos y llamado al diálogo para resolver el diferendo.
Se indicó que Lula expresó a su homólogo venezolano la “creciente preocupación” de ocho países sudamericanos, citando una declaración conjunta del jueves acordada al margen de una cumbre del Mercosur en Rio de Janeiro -firmada por Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay- que pedía que “ambas partes negocien para buscar una solución pacífica” al diferendo territorial.
Lula reiteró ese llamado en su conversación con Maduro, proponiendo que el jefe de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) contacte a ambas partes para iniciar conversaciones sobre la disputa, según su oficina.
Según la nota, Lula le dijo al gobernante venezolano: “Somos una región de paz”.
La tensión sobre el Esequibo se ha disparado desde que el gobierno de Maduro celebró un controvertido referendo el domingo pasado en el que el 95% de los votantes apoyó declarar a Venezuela como el legítimo dueño de la región, según los resultados oficiales.
Debido a las tensiones, Brasil decidió reforzar días atrás su presencia militar en la frontera con Venezuela y Guyana. Estados Unidos anunció el jueves ejercicios aéreos militares en Guyana.
CRISIS DIPLOMÁTICA
El Consejo de Seguridad de la ONU debatió este viernes 8 de diciembre con carácter “urgente” la controversia entre Venezuela y Guyana por el Esequibo, un territorio rico en petróleo que se disputa hace más de un siglo y que preocupa a la comunidad internacional.
La reunión a pedido de Guyana se realizó a puertas cerradas y finalizó sin declaraciones o algún comunicado. El gobierno de Georgetown alegó que las últimas medidas adoptadas por Caracas sobre el Esequibo amenazan la paz y la seguridad internacional que son competencia de esta instancia de Naciones Unidas.
Las delegaciones abandonaron la sala con rosas en la mano, ofrecidas por Ecuador, que preside el Consejo en diciembre.
Ambos países se han acusado mutuamente de incurrir en “provocaciones” en medio de la tensión, que se elevó luego que Venezuela celebrara el 3 de diciembre un referendo consultivo en el que más del 95% de los votantes que participaron aprobó crear una provincia venezolana en el Esequibo, un territorio que representa dos tercios de Guyana, y dar nacionalidad venezolana a los 125.000 habitantes de la zona en disputa.
No obstante, la controversia ya viene agudizándose desde el 2015, cuando la gigante estadounidense ExxonMobil descubrió vastas reservas petroleras en esa zona. Tras la consulta venezolana, el presidente Nicolás Maduro anunció planes para otorgar licencias para también extraer crudo en aguas en disputa.
“Guyana y la ExxonMobil se tendrán que sentar con nosotros cara a cara más temprano que tarde”, lanzó el mandatario este viernes durante un acto frente al palacio presidencial de Miraflores, donde mostró un mapa de Venezuela que incluía al Esequibo como territorio oficial y no como zona en reclamación, como normalmente era representado.
Analistas señalan que el referendo y el aumento de la retórica nacionalista es un intento de distraer la atención sobre el llamado a elecciones libres en Venezuela el año próximo.
“Fue como una especie de globo de ensayo de cara a las elecciones presidenciales” para medir la “capacidad de movilización y tratar de afinar su estrategia para 2024″, dijo Mariano de Alba, asesor del International Crisis Group.
El chavismo señaló de traición a la patria a varios dirigentes opositores por manifestarse en contra del referendo. La fiscalía anunció el arresto de un estadounidense y un opositor por supuestamente “conspirar” con ExxonMobil en la disputa.
Otras 14 órdenes de captura fueron emitidas contra otros dirigentes, la mayoría fuera del país.