Managua. AFP. La oposición nicaraguense inició un bloqueo indefinido de las sesiones del Congreso con el fin de presionar al oficialismo para que desista de validar, mediante una polémica maniobra, un decreto presidencial que prorrogó el mandato de 25 altos funcionarios.
Las fuerzas opuestas al gobierno sandinista, que tienen una frágil mayoría en el Parlamento, intentan forzar al oficialismo a que anule una versión de la Constitución publicada hace unos días en el diario oficial La Gaceta .
Por medio de esa publicación, el gobierno del presidente Daniel Ortega dejaría en firme un decreto que extendió el mandato a 25 funcionarios, entre ellos los cuestionados magistrados del Consejo Supremo Electoral (CSE).
Los diputados opositores del Partido Liberal Constitucionalista, Alianza Liberal Nicaraguense, Movimiento de Renovación Sandinista y el Movimiento Vamos con Eduardo acordaron dejar sin quórum al Parlamento hasta que sea anulada esa publicación.
El presidente del parlamento, el sandinista René Núñez, suspendió la sesión y afirmó: “no puedo obligar a la gente a que haga quórum”, e instó a sus colegas de la oposición a dejar a un lado intereses partidarios para despachar leyes de interés nacional.
“Si acaso mañana (hoy, jueves) no se logra asistencia, vamos a solicitar que haya sesión el viernes y el sábado porque es importante que se saque la reforma al presupuesto”, declaró Núñez.
El gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional de Ortega tiene 38 diputados en el Parlamento unicameral de 92 escaños, que este año ha trabajado en forma intermitente debido a la falta de quórum (47) por los frecuentes boicots de la oposición.