En un comunicado difundido en Argel, el Frente Polisario anunció la muerte de un saharaui de 26 años y centenares de heridos.
Por su lado, en Rabat, fuentes marroquíes informaron de la muerte de un gendarme y un policía durante el asalto al campamento, y de un bombero, apuñalado durante incidentes registrados por la tarde en El Aaiún.
El Polisario, que lucha por la independencia del territorio, denunció una operación militar “aérea y terrestre” contra el campamento en el territorio ocupado.
La intervención se inició a eso de las 7:00 a. m. locales, cuando los efectivos de la Fuerza Pública irrumpieron usando potentes cañones de agua contra los habitantes del campamento.
El campamento fue instalado el 19 de octubre por unos 12.000 habitantes, según Rabat, que protestaban contra “el deterioro” de sus condiciones de vida y reclamaban “empleos y viviendas”. El Polisario afirmó que en el campamento había unos 28.000 saharauis.
Un comité encargado de la coordinación con las autoridades marroquíes presentó esta acción como un “acto de protesta social” sin dimensión política.
“La tercera ronda de debates informales entre Marruecos y el Frente Polisario sobre el futuro del Sahara Occidental comenzó esta mañana en Long Island”, cerca de Nueva York, subrayó ayer un comunicado de la ONU.
En las negociaciones sobre el Sahara Occidental, una excolonia española anexada a la fuerza por Marruecos en 1975, participan también Argelia y Mauritania.
El Frente Polisario, apoyado por Argelia, reclama la independencia por medio de un referendo de autodeterminación, que había sido acordado en los años 90. Rabat, que cambió de criterio, propone amplia autonomía bajo su soberanía y acepta un referendo si no incluye la opción de independencia.
Por su parte, la defensora de derechos humanos saharaui Aminatu Haidar acusó a Marruecos de buscar una “guerra civil entre saharauis y marroquíes”. “Es horrible lo que pasa allá. Habrá seguramente un balance elevado de muertos y heridos”, denunció Haidar.