Washington. El presidente estadounidense Joe Biden dijo este martes que “si Trump no fuera candidato, no estoy seguro de que me presentaría” a un segundo mandato en las elecciones de 2024.
"Pero no podemos dejarlo ganar", añadió el demócrata de 81 años en un evento de donantes demócratas cerca de Boston (noreste), al referirse al expresidente republicano.
Biden elogió la "voz poderosa" de la excongresista republicana Liz Cheney, quien advirtió el domingo que Estados Unidos avanzaba "como sonámbulo hacia una dictadura" si el expresidente, doblemente imputado, regresaba a la Casa Blanca.
También mencionó a la revista The Atlantic, que se sumó a los principales medios estadounidenses como The Washington Post y New York Times para advertir sobre el riesgo de un segundo periodo de Trump.
Durante el evento, Biden aprovechó para citar el lenguaje cada vez más hostil de la campaña, donde el magnate republicano se ha referido a sus oponentes como "alimañas", y comparó esa beligerancia con la de los nazis en ascenso de Adolfo Hitler en la década de 1930.
"Trump ni siquiera está escondiéndolo. Nos está diciendo lo que va a hacer", dijo Biden. "No está yéndose con rodeos".
En su regreso a Washington, los periodistas volvieron a preguntarle a Biden si aspiraría a la presidencia si Trump no estuviera en carrera. "El está aspirando, y yo tengo que aspirar", respondió.
Si Trump se retirara, ¿Biden haría lo mismo?, insistieron los reporteros. "No", dijo el mandatario.
Biden, cuya campaña tiene dificultades para despegar, afirma estar mejor posicionado para derrotar de nuevo a Donald Trump.
El demócrata, cuya edad inquieta a los votantes y que se ve en aprietos para promover sus resultados económicos, repite con frecuencia que la democracia misma está en juego en esta nueva confrontación anunciada con el magnate inmobiliario.
Pese a su impopularidad y salvo por un cambio sorpresa en los planes o un grave problema de salud que lo obligue a retirarse, Biden está casi seguro de ganar la nominación de su partido para las elecciones de noviembre de 2024.
Donald Trump, por su parte, es hasta ahora el gran favorito de las primarias republicanas.