
Chandigarh, India
El arquitecto francosuizo Charles-Édouard Jeanneret-Gris , conocido como Le Corbusier, llegó a India con la misión de crear Chandigarh, una ciudad que simbolizaría la modernidad de este país asiático nacido tras la independencia de los británicos.
Aunque el profesional logró un amplio reconocimiento en el extranjero, en India su obra fue vista como la de un extraterrestre.
65 años después de que el arquitecto aceptara construir la que sería la capital del estado del Punyab (norte), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró parte del trabajo de Le Corbusier, incluido el complejo del Capitolio de Chandigarh, Patrimonio Mundial.
La justificación dada por la Unesco es que este creó "un nuevo modo de expresión de la arquitectura".

"No tienen ni idea, ni idea, (...) es desalentador, pero eso también significa que tenemos mucho trabajo por hacer", explicó la directora del Centro Le Corbusier de Chandigarh, Deepika Gandhi, acerca de cuánto saben sus compatriotas del arquitecto.
Además, añadió la directora, entre los que sí han oído hablar de Le Corbusier existe "la creencia extendida de que (...) no sabía cómo funcionaba la India, que no supo diseñar pensando en la India".
"Lo más gracioso que puedes escuchar es que 'Chandigarh no es una ciudad india'. Pero una ciudad india no necesita ser caos, ruido y anarquía, puede ser orden" , sentenció Gandhi, quien remarcó que detrás del proyecto de la urbe está el sueño de modernidad del primer mandatario de la India independiente, Jawaharlal Nehru.

Ciudad en la que impera el orden
Guste o no, nadie puede negar que, en la India, el orden de Chandigarh es único.
Inspirada en el cuerpo humano y con forma de rayuela, cada parte de la ciudad tiene un fin: las vísceras son la zona industrial, el corazón es el centro capitalino, el sistema circulatorio lo conforman los siete tipos de carreteras que cruzan la urbe, los pulmones son los parques y la cabeza es el complejo del Capitolio.
Es ahí, en el Capitolio, donde están ubicados los tres edificios más emblemáticos de Le Corbusier en Chandigarh y claves para el funcionamiento de los estados del Punyab y Haryana, al ser desde 1966 capital compartida de ambos: el Tribunal Supremo (Poder Judicial), la Asamblea (Poder Legislativo) y el Secretariado (Poder Ejecutivo).
Para remarcar la influencia del complejo del Capitolio en el devenir de la arquitectura moderna, Sohan Lal Saharan, profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad del Punyab en Chandigarh, comenta que siempre suele dar a sus alumnos el mismo ejemplo.

Según el profesor, basta con observar muchos de los elementos de esas tres monumentales construcciones, de forma rectangular y dispuestas de manera asimétrica en una enorme explanada, para poder apreciar la influencia que han tenido en otros arquitectos.
Está el uso del hormigón armado, la planta libre de muros mediante el uso de pilares, el juego de luces mediante la colocación estratégica de ventanas y cristaleras, sus experimentaciones con la luz y la sombra o el empleo de grandes parasoles de concreto.

De acuerdo con el profesor Saharan, y aunque reconoce que quizá el uso de ciertos materiales no fue el adecuado, otros elementos que buscan combatir las altas temperaturas son los numerosos parques repletos de árboles o la orientación especial de toda la urbe, incluidas las casas, teniendo en cuenta el sol.
"Por ejemplo, cuando conduzco por la tarde le suelo decir a mi hijo que el sol no me ciega porque se encuentra a un lado. (Y es que Le Corbusier) siempre remarcó la importancia de la naturaleza en la vida, por lo que quiso que todos los edificios estuvieran marcados por ella", sentenció el académico.
