Bogotá. El Clan del Golfo, la mayor banda narcotraficante de Colombia, manifestó su disposición este martes para reanudar los diálogos con el presidente Gustavo Petro, los cuales se suspendieron hace un año a raíz de ataques contra civiles y fuerzas públicas.
“Aceptamos la invitación hecha por el señor presidente, en el sentido de sentarnos a negociar las condiciones políticas que permitan las transformaciones sociales”, expresó la organización criminal en un comunicado.
El texto, fechado el 18 de marzo y cuya veracidad fue confirmada este martes por el abogado del Clan, Ricardo Giraldo, añade: “Reiteramos que estamos prestos a asistir a donde se nos indique”.
Este lunes, el presidente Petro señaló que el Clan del Golfo “tiene el balón” para concretar nuevos acercamientos. “Si se atreven, abrimos las mesas de negociaciones”, aseguró el mandatario de izquierda.
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En marzo de 2023, el presidente sepultó las conversaciones que mantenía con el Clan, debido a que sus integrantes estaban pagando a mineros ilegales para bloquear vías y perpetrar ataques contra la fuerza pública y civiles en el norte del país. Nunca se formalizó una mesa de negociaciones.
Petro advirtió que si rechazan dialogar nuevamente, “la decisión” del gobierno “es destruir el Clan”, que según cifras oficiales cuenta con unos 4.000 miembros.
El cartel, conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), insiste en ser reconocido como una entidad política, equiparable a las guerrillas que negocian la paz con el gobierno. No obstante, el presidente Petro asegura que está en conversaciones con la recién elegida fiscal Luz Adriana Camargo para establecer el marco legal que permita su “acogimiento colectivo a la justicia”.
El Clan rechazó previamente un plan de sometimiento propuesto por el presidente, que implicaba su rendición y entrega de armas a cambio de beneficios judiciales. Consultado sobre este tema, el abogado Giraldo ratificó a Caracol Radio que “ellos (los miembros del cartel) no se van a someter”, pues se consideran una entidad política.
Este martes, varios medios de comunicación informaron que el Clan del Golfo está obstaculizando vías cercanas al municipio de Tierralta (noroeste), donde Petro tiene previsto participar en un evento público.
Según estimaciones oficiales, el Clan del Golfo trafica al exterior alrededor de 700 toneladas de cocaína al año. Además, se le vincula con actividades de minería ilegal y el tráfico de migrantes en la frontera con Panamá a través de la selva del Darién, aunque sus líderes lo niegan.
Alias Otoniel, el líder máximo de la organización, fue detenido en octubre de 2021 y extraditado a Estados Unidos en mayo del año siguiente. Cabe destacar que Colombia es el principal productor de cocaína a nivel mundial.